El matrimonio fallecido en el accidente de tráfico de Casabermeja iba a la celebración de una boda

Una boda siempre suele ser motivo de celebración. 'Suele' porque hay veces que entre historias de amor que siguen el guion de la lealtad, el compromiso y la eternidad, la vida se trunca en un pestañeo. Preparados para la ocasión, con la emoción del momento y ganas de pasarlo bien, Andreea Lancu y Alfonso Guijarro, ambos de 47 años, perdieron la vida el pasado sábado en el brutal accidente de Casabermeja que se saldó con cuatro fallecidos y tres heridos.

El matrimonio tenía el destino bien marcado en su mapa de ruta. Justo el que tocaba después de asistir a la misa de compromiso de dos grandes amigos que marcaba el inicio de un día importante para la familia. De esos que se visitan a través de álbumes de fotos años después. Sin embargo, aunque el viaje hacia Colmenar, donde tendría lugar el convite en una finca a partir del mediodía, podría haber sido como cualquiera de los trayectos que la pareja realizaba a diario–ya que tenían su domicilio en Pie Gallina, un núcleo rural de Alhaurín el Grande–un choque frontal de su furgoneta con otro turismo acabó con sus vidas en el kilómetro 5 de la carretera A-356 poco tiempo después del «sí, quiero» de sus seres queridos.

Andreea, de Bucarest, y Alfonso, de Málaga, perdieron la vida junto a una joven de 18 años–quien sería amiga de la familia según cuentan personas próximas a las víctimas–y el ingreso en la UCI de su hijo también de 18 años, que aún está en recuperación. Al volante del otro vehículo, una joven malagueña de la misma edad que viajaba junto a dos mujeres de 30 y 22 años perdió la vida, mientras que sus amigas heridas permanecen estables dentro de la gravedad, una de ellas dada de alta médica ya.

Hasta el momento, la investigación apunta que el exceso de velocidad podría ser la causa principal que habría llevado a la conductora novel del turismo a invadir el carril contrario, según las fuentes consultadas por este periódico. Los hechos tuvieron lugar en la vía de doble sentido que une Casabermeja con Torre del Mar, con un choque frontal que arrojó la furgoneta–con la familia Guijarro Lancu y los dos jóvenes de 18 años en su interior a un terraplén– y el turismo de la otra joven dirección Casabermeja, dejando el otro vehículo en sentido contrario.

La tercera víctima mortal de la furgoneta era ucraniana, según cuentan personas del entorno de la familia, y vivía en Reino Unido, por lo que ayer su cuerpo fue repatriado. El día después del accidente, un grupo de amigos del matrimonio fallecido acudió al lugar del accidente para colocar flores en recuerdo de la pareja, a la que tratan de despedir aún impactados por la tragedia. «Ahora, cuando pasas por el lugar donde perdieron la vida, no solo encuentras flores, encuentras el ramo de la novia, que acudió al lugar a dejarlo tras enterarse del accidente mortal de sus amigos», cuenta a SUR una persona próxima a la familia.

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