Julio González-Ruiz tenía 50 años y era malagueño. Su pasión por su trabajo como profesor lo llevó a Estados Unidos y de ahí a la República Dominicana, donde había fijado su segunda residencia y donde planeaba instalarse definitivamente una vez que se jubilara. El ... pasado fin de semana, fue víctima de una agresión y murió.
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El cadáver fue hallado el domingo por la mañana en el apartamento que Julio González-Ruiz compró en un complejo residencial en el distrito de Los Alcarrizos, en Santo Domingo. Según había contado a sus amigos, no era el mejor barrio para vivir, pero se había integrado y era feliz.
En la vivienda se encontró cierta cantidad de dinero en efectivo –en pesos y dólares– que el autor o autores del crimen no sustrajeron al huir, según recoge la prensa local. Lo que sí se llevaron, en cambio, fue el automóvil que Julio acababa de comprar, y que tenía aparcado en la puerta, así como los dispositivos electrónicos que había en el piso.
Según relata un buen amigo de la víctima, Julio les contó que necesitaba un coche –una 'jeepeta', que es como se llama en Centroamérica a los modelos de todoterrenos similares al Jeep– para moverse por la República Dominicana, donde se había instalado de forma algo más permanente a raíz de la pandemia, que le había obligado a teletrabajar.
Por eso, días antes del suceso decidió viajar a Estados Unidos para sacar una suma de dinero en efectivo del banco y trarse algunos enseres personales. Su domicilio lo tenía en Atlanta, en el estado de Georgia (al parecer, tenía ya la doble nacionalidad), donde trabajaba como profesor asociado en Spelman College, al que llevaba vinculado 17 años y donde había llegado a dirigir el departamento de Idiomas y Culturas del Mundo.
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La institución educativa publicó ayer en su página web unas sentidas palabras de despedida al docente malagueño. «Cuando el doctor González-Ruiz entraba a cualquier reunión, traía consigo un espíritu alegre y una energía positiva que iluminaba cualquier salón. Quería mucho a Spelman College y deja un agujero en los corazones de todos los que lo conocieron», reza una parte del texto difundido por la institución.
Julio González-Ruiz se crio en Málaga con su hermano y sus padres, que residen en el distrito de Cruz del Humilladero. Estudió en el Instituto Santa Rosa de Lima e hizo la carrera de Filología Hispánica en la Universidad de Málaga (UMA). Tras una temporada en Israel, donde aprendió inglés, volvió a Málaga y estuvo dando clases de español a extranjeros.
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Según cuenta uno de sus amigos, con el apoyo del profesor Antonio Garrido Moraga (fallecido en 2018), se fue con una beca a Estados Unidos. Se instaló en Chicago y empezó a dar clase en una universidad. Allí se doctoró en literatura española en la Universidad Estatal de Pennsylvania.
En 2004 se mudó a Georgia, donde lo contrataron en el Spelman College como profesor asociado. Allí se interesó por la historia afroamericana, en la que se fue especializando, como demuestran algunas de sus publicaciones científicas. Viajó a la República Dominicana, donde se interesó e investigó los procesos migratorios. Aun así, solía venir todos los años a Málaga a ver a su familia.
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Según la página web de la Spelman College, Julio González-Ruiz creó y dirigió dos programas de estudios en el extranjero para estudiantes en colaboración con la Universidad de Málaga y CIEE-Santo Domingo, en la República Dominicana.
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