Málaga registra unos diez robos con fuerza en casas al día

Aunque no es uno de los delitos que más han aumentado, sí es de los que más alarma genera en los vecindarios. Ejemplo de ello es la situación que se vivió el año pasado en zonas como en Puertosol, en Puerto de la Torre, donde los vecinos llegaron a crear patrullas vecinales para disuadir a los ladrones-que finalmente fueron detenidos- tras sufrir varios robos en cuestión de semanas. O como las denunciadas recientemente en la zona de Jarazmín, donde el Viernes de Dolores entraron en cuatro inmuebles de una misma urbanización.

De acuerdo con las fuentes consultadas, muchos de estos robos son cometidos por bandas que están especializadas en estos hechos delictivos. Los modus de operar varían, pero es común la predilección por los domicilios que se encuentran en zonas aisladas o en urbanizaciones que colindan con senderos. Se trata de una estrategia, ya que así los delincuentes tienen más fácil el acceso sin ser vistos y la huida.

Asimismo, las mismas fuentes señalan que en buena parte de estos casos los robos son perpetrados por grupos itinerantes que se mueven de una ciudad a otra para intentar escapar del radar de la policía. Los periodos vacacionales son aquellos en los que más se incrementan estos delitos, ya sea a través del escalo de los ladrones para entrar por ventanas abiertas o balcones, o con técnicas como el 'bumping' o el 'impresioning'.

En el primer caso, los cacos usan una llave especialmente modificada en la cerradura para, tras una serie de golpes, mover la posición de los bulones de su interior, de modo que la puerta se abre; en el segundo, buscan hacer una copia de la llave introduciendo finas láminas en el bombín, de manera que quedan grabadas las marcas de la original, explican las fuentes consultadas.

Otra de las metodologías detectadas y de las que alertan es la del 'resbalón', ante la que la policía ha informado en varias ocasiones de que se puede evitar simplemente echando la llave a la puerta antes de abandonar la casa. Los delincuentes también recurren al método de la 'siembra': ponen unos hilos transparentes de silicona o plásticos muy finos en las puertas para detectar movimiento o si los moradores han salido.

Los robos en viviendas supusieron la gran mayoría de los asaltos con fuerza perpetrados en el interior de inmuebles en 2023. En total, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado tuvieron conocimiento de 4.628 casos que afectaban tanto a domicilios como a establecimientos y otro tipo de instalaciones. Estos robos se incrementaron en un 2,6 por ciento respecto a 2022, cuando se contabilizaron 4.514 infracciones de este tipo.

De acuerdo con el Balance de Criminalidad, las infracciones penales se incrementaron en casi todo tipo de delitos, a excepción de los homicidios y asesinatos consumados y los que quedaron en grado de tentativa al sobrevivir las víctimas. De nuevo, vuelve a llamar la atención el crecimiento de los delitos sexuales: hubo 747 casos -los que la policía tuvo constancia-, lo que implica un aumento del 18,9 por ciento respecto al ejercicio anterior.

Dentro de los delitos por esta conducta, el Ministerio del Interior concreta que se produjeron 152 violaciones en las que las víctimas sufrieron penetración. Estas también aumentaron considerablemente en relación al año previo, cuando se registraron un 24,6 por ciento menos de casos.

El balance apunta también a los robos con violencia e intimidación, que subieron un 10,3 por ciento tras sumar 1.921 delitos de este tipo, y también de las sustracciones de vehículos, con 1.900 infracciones penales por este motivo, un 9,6 más que en 2022. Igualmente, el tráfico de drogas se vio incrementado, concretamente en un 12,9 por ciento, con 1.244 casos.

La cibercriminalidad, por otro lado, rompe el récord de la estadística al aumentar en un 52,3 por ciento los casos en apenas un año en la provincia. Si en 2022 hubo 11.863 delitos perpetrados a través de la red, estos se dispararon a 18.063 al año siguiente con las estafas informáticas a la cabeza. Los hurtos, por otra parte, son la infracción penal que más casos suman con diferencia en la provincia, con hasta 26.884 denuncias el pasado año, unas 1.700 más que en 2022.