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Este viernes ha pasado a disposición judicial el segundo hombre detenido por el crimen de Natalia, la mujer de 46 años y origen colombiano decapitada cuyo cuerpo apareció el pasado domingo en aguas de Marbella. La juez ha decretado la puesta en libertad provisional para el sospechoso, al que se investiga como presunto cooperador necesario del asesinato.
Así lo ha acordado la titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Marbella tras tomar declaración al arrestado, adoptando la decisión después de que el fiscal no pidiera su ingreso en prisión ni la convocatoria de la comparecencia de prisión, según informaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
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Como medida cautelar, la juez ha decretado que se imponga al investigado la medida de prohibición de salir del territorio nacional, así como la retirada del pasaporte y la obligación de comparecer ante el Juzgado todos los lunes de cada semana.
El exnovio de Natalia, que fue detenido el lunes en Marbella -un día antes que el segundo arrestado-, confesó este jueves a los policías que mató a la mujer, la descuartizó y lanzó su cuerpo al mar. Poco después, los resultados de las pruebas de ADN también determinaron que correspondía con la víctima el cuerpo hallado en la playa.
La titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Marbella decretó el ingreso en prisión para el autor confeso del crimen, también de origen colombiano y de 45 años. Se le investiga por un delito de asesinato y otro de quebrantamiento de condena.
El hombre, casado y con dos hijos, había mantenido una relación de cinco meses con la víctima que terminó con una denuncia por malos tratos por la que fue condenado a seis meses de cárcel. La Fiscalía accedió a suspender su ingreso con la condición de que no volviera a delinquir y se le había impuesto 16 meses de prohibición de aproximación o comunicación con Natalia.
La familia de ella, tras ver los vídeos del cadáver descuartizado en redes sociales, creyó reconocer a la mujer y denunció su desaparición en la comisaría de Marbella, donde indicó que era víctima de violencia de género.
Ahora los miembros del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil de Málaga continúan buscando en el mar las partes del cuerpo amputadas a la víctima. Los especialistas llevan desde el jueves centrándose en el lugar en el autor confeso del crimen dijo a los policías que había arrojado los restos de Natalia tras acabar con su vida.
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