Dos hombres, a juicio por el atropello mortal de un joven tras una pelea en Benalmádena

Lo que iba a ser una noche de fiesta se torció por completo sobre las 05.30 horas, cuando los encausados y las víctimas coincidieron en un pub. Según expone la Fiscalía en su escrito, al que SUR ha tenido acceso, en el interior del local se produjo una discusión entre uno de los procesados y el joven de 22 años.

En ese encontronazo, según apunta la acusación, el chico agredió al encausado causándole lesiones leves, motivo por el que llamaron a la Policía Nacional. Tras mediar los agentes entre las partes, los procesados, que habían consumido cocaína y alcohol, emprendieron el camino hacia su vehículo, siendo seguidos por los otros dos chicos.

Se subieron a una moto y "salieron en persecución" de los dos encausados, que iban en dirección a su coche. Cuando ya estaban cerca, dejaron el ciclomotor en las inmediaciones de una discoteca de Solymar y volvieron a enfrentarse a los dos acusados.

Siempre según la versión de la Fiscalía, el joven que posteriormente resultaría mortalmente atropellado esgrimió un cuchillo de grandes dimensiones e hirió levemente al mismo procesado al que ya había agredido anteriormente. Tras ello, supuestamente, los acusados decidieron responder con más violencia.

El Ministerio Público sostiene que los dos procesados se pusieron "de común acuerdo" y, "con ánimo de acabar con la vida de sus dos atacantes", bajaron con su vehículo por la Avenida de Mijas hasta la confluencia con la Avenida Antonio Machado.

En su escrito asegura que lo hicieron a sabiendas de que por la misma venía el ciclomotor en el que iban los dos jóvenes con los que habían peleado. De hecho, indica que esperaron en el lugar hasta el instante en que apareció la moto.

En ese momento, señala la fiscal, el procesado que iba de conductor aceleró el vehículo y, a gran velocidad, se introdujo en una calle en dirección contraria para embestir "de manera intencionada" y sorpresiva a los ocupantes de la moto, sin que el joven que la conducía tuviera oportunidad de esquivarlo.

Luego, siempre de acuerdo con la versión acusatoria, el conductor del turismo pasó el vehículo de cuatro ruedas por encima de el de dos ruedas, dando después marcha atrás con la moto enganchada a los bajos hasta el paso de peatones de la Avenida de Mijas, donde quedó la misma.

Los encausados, supuestamente, dieron en ese punto la vuelta y huyeron a gran velocidad para darse a la fuga. El joven de 22 años murió prácticamente en el acto a consecuencia de aquel atropello, presuntamente intencionado. El coche, de acuerdo con los resultados de la autopsia, lo aplastó al pasarle por encima.

Su amigo, que entonces tenía 19 años, fue evacuado a la UCI en estado grave tras sufrir múltiples traumatismos a causa de estos hechos, señala también la Fiscalía. No recibió el alta médica hasta casi un mes después, cuando abandonó el hospital en silla de ruedas dada la atrofia sufrida en una pierna.

De acuerdo con el escrito, sufrió lesiones graves que precisaron una asistencia médica de urgencias para evitar que su vida corriera peligro. Requirió más de 400 días para su curación, pese a lo que continúa padeciendo secuelas de aquel atropello. Además, precisa tratamiento psicofarmacológico por estrés postraumático.

La Fiscalía considera que los dos hombres son autores de un delito de asesinato con alevosía y otro en grado de tentativa, siendo los dos presuntamente responsables, aunque el conductor actuara en calidad de autor y el copiloto como cooperador necesario. Por estos hechos reclama 26 años de cárcel para cada uno.

El procesado que conducía, además, está investigado por un delito contra la seguridad vial, ya que condujo supuestamente bajo los efectos del alcohol y de drogas, por el que solicitan que se le imponga una multa de 2.790 euros.

Del mismo modo, la acusación pide que los supuestos responsables indemnicen a los padres del joven fallecido en la cantidad de 100.000 euros para cada uno y que, en caso de que quede acreditado que un menor es hijo de la víctima, lo que va por el cauce de la vía civil, también reciba 200.000 euros.

Por otro lado, estima que el perjudicado que sobrevivió al atropello tendrá que recibir 39.868 euros por las lesiones temporales y las secuelas que todavía padece.