Los fiscales antidroga alertan de la «falta de medios» para acabar con el tráfico en la Costa del Sol

Este protagonismo indeseado de la provincia ha hecho que la capital sea la elegida para acoger la celebración de la Junta de la Fiscalía Especial Antidroga, que este lunes 26 de junio arrancó en la Cámara de Comercio de Málaga, coincidiendo con el Día Mundial contra las Drogas. Precisamente, una de las cuestiones que se puso sobre la mesa en la inauguración de estas jornadas, que se prolongarán hasta el miércoles, es la necesidad de reforzar los medios para poder combatir esta lacra de forma efectiva.

Como destacó la fiscal jefa Antidroga, Rosa Ana Morán, no hay territorio nacional que esté exento de redes de narcotráfico, si bien, Málaga, por su proyección internacional y su posición transfronteriza, lleva años siendo un punto neurálgico y estratégico para los capos de la droga, que se establecen en la provincia para hacer negocio y, a su vez, escapar de las autoridades judiciales de sus países de origen.

«Hacen falta más medios humanos, más fiscales y más medios procesales», subrayó al respecto, incidiendo a su vez en la importancia de contar con procedimientos «que permitan respuestas ágiles para la adopción de medidas de investigación», así como «una buena regulación de los agentes encubiertos y de los equipos conjuntos de investigación». De hecho, fue clara al subrayar que los fiscales trabajan «con una legalidad obsoleta».

A ello, añadió Morán, se une la necesidad de continuar avanzando en materia de cooperación internacional, algo que ya se está haciendo con Marruecos para tratar de controlar las entradas de hachís a través de la creación de un grupo de trabajo permanente, así como con otros territorios del continente europeo. Como puntualizó, a pesar de todos los esfuerzos realizados, en los territorios andaluces, entre los que mencionó a Málaga, apenas se ha conseguido disminuir el tráfico de esta sustancia.

En este sentido, criticó que no existe un plan real para atajar esta problemática desde un abordaje holístico, ya que la lucha contra las drogas se afronta principalmente desde la prevención, quedando en un segundo plano el origen de esta situación, que reside en la actividad de las bandas criminales. Asimismo, puso de relieve que la Fiscalía Especial Antidroga continúa contando con la misma estructura y competencia que cuando fue creada, hace 35 años, a pesar de que el panorama ha variado muchísimo desde entonces. De ahí que Morán reclame una actualización necesaria para atajar una lacra de carácter transnacional y más organizada que nunca.

En el contexto de la provincia, el fiscal delegado Antidroga de Málaga lamentó que la lucha para erradicar el narcotráfico en la Costa del Sol continúa sin avanzar a la velocidad deseada. En este sentido, explicó que la provincia no solo recibe la droga que procede de África, sino que ésta también llega a través de los grandes puertos andaluces, como el de Málaga o el de Algeciras, que se han convertido en importantes puntos de recepción de las sustancias traídas desde Sudamérica, entre las que despunta la cocaína.

El objetivo a perseguir, incidía Bentabol, tiene que ir más allá de frustrar los traslados de droga y desarticular las organizaciones, ya que, debido a sus potentes infraestructuras logísticas, éstas vuelven a reorganizarse para continuar con su actividad delictiva al cabo de un tiempo. La clave, señaló, está en dar con los grandes jefes de estas organizaciones, ya que son criminales que «no tocan la droga», por lo que resulta especialmente complicado reunir evidencias que, al final del procedimiento judicial, se materialicen en condenas.

«Las medidas de investigación que se necesitan son mucho más sofisticadas y tenemos que realizar una labor mucho más importante de colaboración y cooperación con la Policía y la Guardia Civil a los efectos de conseguir pruebas mínimas necesarias para que los grandes traficantes o jefes de organizaciones puedan ser condenados, y también para que podamos atacar a su base fundamental, que es la base económica», expresaba el experto al respecto.

Por su parte, el consejero de Justicia, Administración Local y Función Pública de la Junta de Andalucía, José Antonio Nieto, puso el foco en el ámbito regional, en el que, como destacó, Málaga comparte la presión delincuencial asociada al tráfico de drogas con otras provincias, como Granada, Cádiz, Huelva, Almería y Sevilla.

Precisamente, según los datos que dio a conocer, en la comunidad autónoma se incautaron hasta 273 toneladas de distintas sustancias estupefacientes a lo largo de 2022, cuando la Policía Nacional y la Guardia Civil realizaron en Andalucía un total de 4.698 operaciones. De estas, 4.278 fueron contra grupos dedicados al narcotráfico y al contrabando, mientras que 420 se centraron en redes de blanqueo de capitales y otros delitos conexos.

En este sentido, la fiscal superior de Andalucía, Ana Tárrago, hizo hincapié en que este encuentro de fiscales antidrogas tiene el objetivo de llegar a conclusiones y a consideraciones prácticas que sirvan para que, tanto desde el Ministerio Público como desde las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, se consiga avanzar en el empeño por atajar la presencia de bandas criminales dedicadas a la recepción y distribución de sustancias, con especial presencia en Andalucía y, en concreto, en la Costa del Sol.

«Lo que es una pena es que los protagonistas de la actividad delictiva van siempre por delante de nosotros, porque cuentan con mejores medios y recursos», apuntó Tárrago. Como contrapunto, recalcó que estas redes tardan poco en reorganizarse una vez que quedan desmanteladas tras las operaciones policiales, lo que está haciendo que aumenten las investigaciones vinculadas al blanqueo de capitales. «Esto es fundamental porque en su corazón económico es donde más daño se les puede hacer», puso de manifiesto.

De acuerdo con datos de la Subdelegación del Gobierno, el año pasado se intervinieron más de 90.000 kilos de distintos tipos de droga en la provincia de Málaga, donde se detuvo a más de 4.000 personas por delitos relacionados con el tráfico (2.594 fueron arrestadas por el instituto armado y otras 1.484 por la Policía Nacional). Según precisaban, más del 95 por ciento de las incautaciones realizadas fueron de hachís, seguida de marihuana y cocaína.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, por su parte, agradeció a la Fiscalía Especial Antidroga su decisión de convocar esta junta en la ciudad malagueña para profundizar en la labor para combatir una lacra que, pese a ser universal, sigue haciendo especial mella en la provincia. En este sentido, recordó que desde el Ayuntamiento se trabaja a conciencia en este aspecto en materia de prevención y sensibilización mediante el impulso de campañas junto a Proyecto Hombre, desde las que se intenta llegar cada vez a un público más joven a través de charlas en colegios.

«Esta prevención empieza por evitar el consumo temprano de alcohol, que muchas veces llega acompañado de algún tipo de sustancias que puede encadenar y crear una dependencia de la que, al final, está el tráfico de drogas», insistía el regidor, haciendo hincapié en que «sin demanda, no habría tráfico» de drogas.