La familia de Dana Leonte pide juzgar a su pareja por asesinato con agravante de género porque «menosprecia al sexo femenino»

Y como suele ocurrir en el ámbito judicial, los hechos se ven de un modo muy diferente en función del cristal con que se miren. Las partes -acusación particular, pública, popular y defensa- han solicitado desde el sobreseimiento por inexistencia del delito hasta el asesinato agravado, pasando por el homicidio.

La acusación particular, que ejerce la familia de Dana, representada por la abogada Antonia Barba, ha pedido que Sergio sea juzgado por asesinato, entendiendo que existió prevalimiento y alevosía doméstica. Este último concepto, desarrollado por la jurisprudencia, subraya lo imprevisible que es el ataque para la víctima cuando viene de la persona con quien convive.

La familia sostiene que en el crimen se habrían dado dos circunstancias agravantes. Barba anunció ante la jueza que existiría un componente de género en el ataque al considerar que Sergio Ruiz «menosprecia al sexo femenino». Esta afirmación la argumentó en los antecedentes del sospechoso, que fue denunciado por malos tratos por la propia Dana -aunque fue absuelto- y también por parejas anteriores.

La acusación particular no pidió más pruebas, aunque sí se adhirió a las solicitadas por la Fiscalía, que calificó inicialmente los hechos de homicidio. El Ministerio Público instó a la jueza a que ordene otra pericial lingüística -sería la tercera- sobre los mensajes enviados desde el móvil de Dana Leonte en las horas posteriores a su desaparición.

La petición de la Fiscalía obedece a que los dos primeros informes, presentados por la acusación particular y la defensa, en los que se estudia la ortografía y el modo de escribir, llegan a conclusiones muy diferentes. El aportado por el abogado Juan José Moreno, que representa a Sergio, apunta a que esos mensajes habrían sido escritos por tres personas diferentes y que ninguna de ellas serían Dana ni Sergio.

El de la acusación particular, que encargó el estudio a la lingüista forense Sheila Queralt, concluye que esos mensajes fueron redactados con una probabilidad alta (+4, el máximo en la escala de la asociación internacional de lingüística forense) por el principal sospechoso y en ningún caso por Dana Leonte.

El Ministerio Público también ha solicitado que dos médicos forenses examinen los huesos hallados durante las batidas y que confirmen que, como figura en el sumario, corresponden a la joven rumana. También pide un informe final de la Guardia Civil en el que recopile todos los indicios y pruebas descubiertas en la investigación del caso.

La defensa, por su parte, ha instado a que se dicte el sobreseimiento respecto a Sergio Ruiz al considerar que, como él mismo manifestó a las puertas de los juzgados, es «inocente». Al mismo tiempo, ha solicitado, como última prueba, un informe químico para determinar si la lejía puede acabar con las manchas de sangre.

La petición de la defensa obedece a que los investigadores argumentaron como uno de los indicios contra Sergio que había limpiado a conciencia la vivienda tras la desaparición de la joven rumana.