Ocho detenidos por secuestrar al hombre que les pagó 100.000 euros con billetes falsos a cambio de droga

Las personas que presenciaron los hechos alertaron de inmediato a la Guardia Civil y comenzó entonces una investigación que finalmente se ha esclarecido en el marco de la operación Costala.

Los agentes iniciaron el dispositivo de búsqueda alertando a todas las patrullas de la provincia para dar con el paradero del individuo. Aunque pocas horas más tarde, un hombre con las mismas características físicas aparecía en la localidad de Manilva, a unos 77 kilómetros de distancia.

El varón presentaba graves lesiones y múltiples contusiones en su cuerpo a consecuencia de la paliza recibida y una herida de bala en un brazo, al huir de la vivienda donde estuvo retenido. El hombre tuvo que ser ingresado en un centro hospitalario para ser intervenido quirúrgicamente como consecuencia de las graves heridas que presentaba.

Tal y como señalan las fuentes consultadas por este periódico, la víctima declaró que sus secuestradores le exigieron el pago de 100.000 euros como condición indispensable para su puesta en libertad.

Gracias a la ardua investigación llevada a cabo por los agentes de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Málaga y de la Guardia Civil de Mijas, apoyados por el Grupo de Acción Rápida, las pesquisas les llevaron a localizar la vivienda en el municipio malagueño de Manilva donde el hombre había estado retenido.

Una vez en el inmueble, los agentes hallaron pruebas evidentes de los delitos cometidos, incluido el proyectil disparado a la víctima del secuestro.

Después de este primer registro, se inició una fase de identificación para dar con las personas implicadas en los hechos. Finalmente, han sido detenidas seis personas (dos mujeres y seis hombres) en Mijas, Benalmádena, Fuengirola, Algeciras y Madrid. Según los investigadores, los implicados forman parte de una supuesta organización criminal dedicada al narcotráfico.

En los sucesivos registros, los agentes de la Guardia Civil encontraron además un arma de fuego cuyo calibre coincidía con el proyectil intervenido en la vivienda de Manilva donde el hombre estuvo retenido, además de 100.000 euros en billetes falsos y un escáner para la detección de dispositivos electrónicos.

Según la investigación de la operación Costala, el dinero falso que hallaron los agentes provendría de una posible transacción de droga frustrada entre el secuestrado y sus captores. Por esa razón los autores de los hechos arriba expuestos exigían a la víctima el pago de 100.000 euros como única condición que permitiría su liberación.

A los ocho arrestados se les imputa la autoría de supuestos delitos de pertenencia a organización criminal, detención ilegal, lesiones y tenencia ilícita de armas.