Otros dos pacientes se suman a las denuncias contra el falso médico de Rincón: cobraba hasta 6.000 euros por tratamiento

La Guardia Civil continúa con las pesquisas para tratar de localizar a enfermos a los que el investigado, de 56 años, hubiera sometido a tratamientos a lo largo de estas tres décadas. Estos, según fuentes próximas al caso, tenían un precio que oscilaba entre los 900 y los 6.000 euros, mientras que por consulta podía llegar a cobrar en torno a 30 euros.

Todo se destapó con las denuncias que interpusieron en enero dos afectados ante el Instituto Armado. Según expusieron, a uno de ellos le defraudó alrededor de 80.000 euros, mientras que el segundo le habría llegado a pagar unos 240.000 euros. A estas se suman las de otras dos víctimas que este jueves han puesto sus casos en conocimiento de la Guardia Civil. Los investigadores sospechan que, durante todo este tiempo, pudo obtener unas ganancias muy superiores a las que, de momento, se tiene constancia.

De acuerdo con las fuentes, el investigado por estafa agravada e intrusismo laboral contaba para su actividad con una consulta privada, instalada en una casa mata en Torre de Benagalbón. Aunque no abría todos los días laborables, las jornadas que estaba en activo podía atender a una media de diez pacientes, aproximadamente, quienes presentaban todo tipo de dolencias y dolores derivados de distintas enfermedades.

Estas citas médicas, como constataron los efectivos, solían durar una media hora. En las mismas, al parecer, el presunto falso médico también recurriría a la medicina alternativa, haciendo uso de hierbas especiales durante los tratamientos.

El investigado, de acuerdo con la Guardia Civil, también habría engañado a algunos pacientes asegurándoles que impartía clases de anatomía patológica en la Universidad de Granada, siendo esto mentira, como contrastaron los agentes. Del mismo modo, a otros les contó, supuestamente, que trabajaba en el Hospital Universitario Virgen de la Victoria, según agregó al respecto el propio Colegio de Médicos de Málaga, que se personará en esta causa como acusación particular.

La entidad colegial, como ha puesto de relieve, también colaboró con las autoridades para destapar este caso tras recibir la consulta del familiar de una de las personas afectadas, quien contactó con la entidad de profesionales facultativos para comprobar si el investigado estaba colegiado, verificándose así que no lo estaba ni en Málaga ni en ningún otro colegio de España.

Entre otra documentación, los investigadores localizaron en su consulta dos agendas en las que tenía apuntadas tanto las citas como los nombres de los pacientes y el dinero que cobraba por los supuestos tratamientos, por los que podía llegar a obtener unos 6.000 euros, según las fuentes. No obstante, el contenido de dichos cuadernos correspondería únicamente con fechas recientes, de ahí que continúe la investigación para localizar a más víctimas.

Los agentes, asimismo, constataron que usaba un sello en los informes en el que dejaba constancia que era médico rehabilitador y su número de colegiado, también falso. Entre otras pruebas, los guardias civiles incautaron diversos informes médicos, análisis de sangre, ecografías y resonancias magnéticas.

Por todo ello, se procedió a su detención como investigado por la supuesta comisión de los delitos de intrusismo laboral y estafa agravada, aunque el hombre se encuentra en estos momentos en libertad provisional. Como medidas preventivas, se le ha retirado el pasaporte y tiene la obligación de ir a firmar a los juzgados cada 15 días.