Diez años de prisión por matar a un amigo y convivir un mes con el cadáver en Málaga

El acusado asestó cuatro puñaladas a la víctima en órganos vitales como el corazón y dejó que se desangrara en una habitación hasta que finalmente murió

Miércoles, 21 de febrero 2024, 18:30

La llamada de una vecina fue lo que destapó el crimen de un hombre en Campanillas. La víctima murió tras recibir cuatro puñaladas de un amigo, quien convivió durante aproximadamente un mes con el cadáver. Hasta que aquella mujer alertó a la Policía Local del ... fuerte olor que desprendía la vivienda.

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La Audiencia Provincial de Málaga ha condenado al amigo a diez años de cárcel por un delito de homicidio después de que él mismo reconociera su implicación. La secuencia que se expone en la resolución es la siguiente: apuñaló cuatro veces a la víctima en su dormitorio y la dejó desangrándose hasta que finalmente falleció.

Tras el ataque, cerró la puerta y la ventana del cuarto en el que estaba el cadáver y continuó viviendo en el domicilio, que no ventilaba para impedir que el olor se expandiera y ser descubierto. Con el tiempo, sin embargo, el cuerpo se empezó a descomponer y a desprender un fuerte olor, que fue advertido por una vecina.

La mujer avisó el 16 de abril de 2022 a la Policía Local del hedor extraño de la casa. Sobre las 12.20 horas, los agentes se personaron en el domicilio e intentaron contactar con los moradores. Nadie respondía. Acudieron efectivos del Real Cuerpo de Bomberos y, cuando empezaron a forzar la puerta, el acusado abrió.

Ante el fuerte olor, los policías se introdujeron en la vivienda y hallaron el cadáver de la víctima en su habitación en avanzado estado de putrefacción. El hombre presentaba cuatro puñaladas que fueron dirigidas a órganos vitales como el corazón, lesiones que produjeron su muerte por shock hipovolémico hemorrágico.

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Una de las cuchilladas asestadas, según el apartado de hechos probados, afectó directamente al ventrículo izquierdo del corazón del fallecido, que padeció un cuadro hemorrágico agudo y, ante la falta de auxilio, un deterioro progresivo de la función circulatoria que lo llevó a una parada cardiorrespiratoria y su posterior muerte. De acuerdo con el fallo, era una persona especialmente vulnerable dada su adicción a las drogas.

El encausado, enjuiciado por un tribunal del jurado, reconoció los hechos. De ahí que la Audiencia Provincial le haya impuesto 10 años de cárcel con la accesoria de inhabilitación absoluta durante el tiempo de la condena y el abono de las costas procesales.

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Del mismo modo, se le ha prohibido acercarse o comunicarse durante 12 años con los dos hermanos del perjudicado, a quienes tendrá que indemnizar en la cantidad de 20.000 euros a cada uno.

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