Tres hermanos detenidos tras apuñalar a dos policías en la Palma-Palmilla

Tres hermanos, con edades comprendidas entre los 44 y los 53 años, han sido detenidos en la Palma-Palmilla por, presuntamente, atentar contra dos policías locales, a los que llegaron a apuñalar con un cuchillo. Los agentes se libraron de sufrir lesiones severas gracias a la protección del uniforme, que frenó las perforaciones.

Los hechos que motivaron los arrestos sucedieron este lunes en torno a las 17.30 horas. No obstante, el origen del suceso se remonta a esa misma mañana, cuando efectivos del Grupo Operativo de Apoyo (GOA) de la Policía Local desalojaron de forma temporal una vivienda de la calle Deva debido al estado de insalubridad en la que se encontraba.

En la misma residían los tres hermanos junto a su madre, quienes, al parecer, padecen síndromes de Diógenes y Noé. Nada más personarse en el domicilio, los policías comprobaron que uno de los sospechosos portaba dos hachas, una en cada mano, pero el hombre acabó accediendo a las recomendaciones de los agentes y depositó las armas en el suelo.

A la familia se le informó de que podría regresar a la vivienda una vez desinfectada, tras lo que se procedió a su desalojo y al cambio de las cerraduras como medida preventiva. La situación parecía controlada y se acabó retirando el despliegue.

Sin embargo, al cabo de las horas, una llamada al 092 alertaba de que los tres hermanos estaban intentando acceder de nuevo a la casa armados con cuchillos.

Tras los hechos de la mañana y siendo conocedores de los antecedentes de algunos de los implicados, los GOA volvieron a desfilar hacia la Palma-Palmilla equipados con chalecos antibalas, cascos y escudos de protección. Iban preparados para cualquier situación de peligro que pudiera ocurrir.

Al adentrarse en el inmueble hallaron a los hermanos en el rellano y rápidamente se fijaron en que uno de ellos tenía las dos manos ocultas tras la espalda, a la vez que se les acercaba. Era el mismo que por la mañana había recibido a los policías con los hachas.

Ataque a cuchilladas

Los agentes le instaron en numerosas ocasiones a que mostrara las manos y depusiera su actitud, pero el sospechoso no hizo caso y, en un momento dado, sacó un cuchillo con el que intentó apuñalar de forma repentina al policía que se encontraba en cabeza con un escudo de protección.

El hombre dirigió la cuchillada hacia la pierna, pero esta no llegó a causar lesión al funcionario al ser frenada por la almohadilla del pantalón. Únicamente consiguió perforar la prenda del agente.

También trató de embestir con el arma a otro policía, al que rajó la parte posterior del chaleco antibalas, sin que la hoja del cuchillo, que medía unos 19 centímetros, le traspasara.

En cuanto los GOA redujeron al hombre, vieron que otro de los hermanos se dirigía a ellos y rápidamente lo interceptaron antes de que tuviera ocasión de sacar el arma blanca que llevaba en la mano, que medía 20.5 centímetros.

Otros policías locales de una patrulla de zona acudieron al lugar del suceso para dar apoyo a los compañeros y lograron que el tercer familiar lanzase otro cuchillo que portaba tras instarle a que depusiera su actitud, tras lo que finalmente lanzó el arma al suelo, siendo rápidamente reducido.

En consecuencia, dos de los hermanos quedaron arrestados como presuntos autores de un delito de atentado a agentes de la autoridad, mientras que el tercero -el que comenzó con los ataques- fue detenido como presunto autor de un homicidio en grado de tentativa.

Por su parte, dos de los policías locales del GOA precisaron asistencia médica tras la intervención, uno con motivo de una erosión en la comisura labial y otro por contusiones en antebrazo, costado y muslo.

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