Detenidos en Antequera por robos en casas: usaban hilo de pegamento para comprobar que estaban vacías

Marcaban las casas que pretendían asaltar usando hilos de pegamento, que resultaban prácticamente imperceptibles. Al cabo de unos días, volvían a los domicilios y, si los marcadores continuaban en su sitio, ya tenían la respuesta que necesitaban: nadie había entrado a las viviendas desde entonces. A continuación, forzaban la cerradura y se llevaban todo lo que encontraban de valor.

Esta es la metodología que empleaba una banda que ha sido desmantelada por la Policía Nacional y que había alquilado un inmueble cerca de Antequera, donde estableció su base de operaciones. Para pasar desapercibidos, sus supuestos integrantes, tres varones de origen georgiano, simulaban que eran turistas.De momento, se les atribuyen siete robos en inmuebles de Antequera, Alicante, Jaén y Molina de Segura (Murcia), aunque los investigadores continúan haciendo gestiones ante las sospechas de que hubieran podido perpetrar más atracos. La autoridad judicial ha decretado el ingreso en prisión de los tres sospechosos.

Las indagaciones se iniciaron el pasado mes de julio, tras una denuncia en la que se alertaba de un robo con fuerza en una casa de Alicante. Los efectivos que acudieron a inspeccionar la vivienda se dieron cuenta de un detalle que había pasado completamente por alto para las víctimas: la puerta tenía pequeños hilos de pegamento.

Se trata de una metodología que, como ha informado la Comisaría Provincial, es muy utilizada por los grupos organizados procedentes de Europa del Este para llevar a cabo estos robos.

Ante la posibilidad de que éste no fuera un hecho aislado y que los responsables fueran integrantes de una organización criminal de carácter itinerante, los agentes de Alicante realizaron gestiones con el resto de plantillas policiales para esclarecer otros hechos delictivos similares en los que hubieran podido participar los mismos autores.

Y estaban en lo cierto. De esta forma, averiguaron que los investigados formaban parte de un grupo organizado de origen georgiano dedicado a perpetrar robos en domicilios por toda la geografía española, empleando para ello el método conocido como «hilo de pegamento». Para ello, colocaban unos testigos plásticos o unos hilos de pegamento, entre el marco y la puerta de acceso a la vivienda.

Pasados unos días, si los marcadores continuaban en su sitio, entraban al inmueble usando diferentes métodos, como la fractura de la cerradura, el resbalón, la llave falsa o el apalancamiento. Los efectivos también comprobaron que la banda mantenía una estricta jerarquía y reparto de funciones. Además, establecían grandes medidas de seguridad en sus desplazamientos mediante vehículos de alquiler y se ocultaban en pisos que también alquilaban para evitar el control policial.

Tras situarlos en Antequera, donde presuntamente se hacían pasar por turistas, los efectivos realizaron un dispositivo que dio como resultado la detención de tres personas. En los registros, se intervinieron multitud de joyas, relojes, dinero y efectos sustraídos por la red criminal en los diferentes domicilios violentados, así como un tubo de pegamento y la ropa utilizada en los robos. En uno de los vehículos, además, los agentes hallaron dos láminas de las que se usan para la apertura de puertas por el método «impresioning».

Tras el cotejo de los datos de los detenidos a través de los mecanismos de coordinación policial, se pudo determinar que eran los supuestos responsables de otros robos con fuerza en domicilios cometidos en distintas localidades del territorio nacional, consiguiendo esclarecer un total de siete ilícitos penales perpetrados en las localidades de Alicante, Antequera (Málaga), Molina de Segura (Murcia) y Jaén.

De las joyas y efectos intervenidos, gran parte pudo ser reconocida y devuelta a sus propietarios. La investigación ha sido llevada a cabo por el grupo de Delincuencia Especializada de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Alicante y por la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de Antequera.

Los arrestados, de nacionalidad georgiana, de 32, 37 y 54 años de edad, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de la localidad de Antequera (Málaga), que decretó el inmediato ingreso en prisión de todos ellos.

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