Desalojan una pedida de mano con más de 100 personas en una nave del polígono El Viso de Málaga

Dentro de la nave parecía que no existía la pandemia. Celebraban una pedida de mano sin ningún tipo de medida de seguridad para evitar el contagio de coronavirus, una situación que dio pie a una intervención policial en la que los agentes tuvieron que desalojar a las más de cien personas que se encontraban en el interior de la nave de la capital malagueña donde tuvo lugar el encuentro.

Los hechos ocurrieron el pasado 15 de marzo sobre las 19.30 horas, en una nave situada en el polígono El Viso. Actuaron de forma conjunta agentes del Grupo Operativo de Apoyo (GOA) de la Policía Local de Málaga y de la Policía Nacional, que intervinieron a raíz de que una patrulla viese como salían cuatro personas del local, que mostraban signos de encontrarse bajo los efectos de las bebidas alcohólicas.

Al acercarse, los policías se percataron de que del interior de la nave salía ruido de música y de personas. Por ello, según han explicado las fuentes consultadas, llamaron a la puerta para inspeccionar el local. A la vez que casi de forma inmediata se hizo el silencio, les abrió la puerta un hombre, quien al parecer les explicó que había alquilado el establecimiento para celebrar una pedida de mano y que todas las personas que había en el interior eran familia.

Los agentes comprobaron que dentro de la nave se incumplía la distancia de seguridad, entre otras medidas establecidas contra el coronavirus. Y es que en el interior fueron contabilizadas un total de 104 personas, cuando el aforo permitido, en base a la reducción establecida por la pandemia, no podía superar los 68 invitados.

Dentro bailaban y cantaban sin mantener la distancia de seguridad, según han precisado las mismas fuentes. Además, tampoco usaban la mascarilla. Por todo ello, los agentes de ambos cuerpos procedieron a desalojar el local y a sancionar a las personas por el incumplimiento de las medidas contra la pandemia, así como al organizador del evento y al arrendador de la nave.

Sin embargo, esta no es la primera intervención que tiene lugar en el establecimiento. Solo unos días antes, agentes del Grupo de Investigación y Protección (GIP) de la Policía Local de Málaga acudieron a la nave después de tener conocimiento de que se había convocado una fiesta a través de las redes sociales.

Cuando acudieron a la zona, observaron a un hombre en la puerta del local, desde el que emanaba el sonido de la música y del público que había en su interior. Los agentes se entrevistaron con el varón, que resultó ser el encargado del local, tras lo que procedieron a su inspección.

Dentro, siempre según las mismas fuentes, había más de 30 personas, estando una decena de ellas sin mascarilla. Al parecer, también había otros dos asistentes que incumplían las medidas contra el coronavirus, ya que habían salido de su provincia sin contar con ninguno de los motivos que permiten la movilidad.

Esta intervención, en la que los agentes contaron con el apoyo de sus compañeros del GOA, se saldó con las denuncias por no respetar las medidas decretadas por las administraciones para luchar contra la pandemia. Además, los policías locales identificaron a una joven, que es la que supuestamente convocó la fiesta a través de las redes sociales.