Un gran incendio en una chatarrería de Málaga moviliza a los bomberos durante seis horas

Los efectivos del Real Cuerpo de Bomberos de Málaga se desplegaron este viernes por un gran incendio registrado en un desguace-chatarrería en la capital que por fin ha podido quedar extinguido anoche después de seis horas de lucha contra las llamas. Según han confirmado las fuentes consultadas por este periódico, el dueño del negocio tuvo que ser evacuado a un hospital Regional ya que presentaba quemaduras en los brazos.

Las alarmas saltaron sobre las 14.30 horas, cuando el Servicio de Emergencias 112 Andalucía comenzaba a recibir llamadas en las que se avisaba del fuego. Se ha registrado en la zona de Los Ruíces, en un negocio especializado en desguace y chatarrería situado en Camino Medioambiental.

El 112 dio aviso a todos los servicios de emergencias: Policía Local y Nacional, así como efectivos sanitarios y del Real Cuerpo de Bomberos de Málaga. Estos últimos han sido los que se han empleado a fondo para extinguir las llamas.

Para ello movilizaron casi todas las dotaciones disponibles en la capital. Según han explicado las mismas fuentes, desde un primer momento los bomberos se han desplegado por todo el perímetro del negocio para evitar que el incendio se propagara a otras naves y proceder a su control.

Sin embargo no fue una tarea sencilla. Los especialistas se han enfrentado a un fuego muy virulento, que se crecía cuando soplaban las rachas de viento.

Además, había mucho material combustible en el desguace, como plásticos y neumáticos. Esto, unido a las constantes explosiones provocadas por restos de combustible en los coches o de recipientes de gas para los trabajos de chatarrería, ha puesto en peligro a los bomberos, que han tenido que guardar una distancia de seguridad para no ser alcanzados por las detonaciones.

La impresionante columna de humo negro, que se veía desde numerosos puntos de la ciudad e incluso desde Torremolinos generó una gran alarma entre los malagueños. También ha complicado mucho las tareas de extinción, ya que se trataba de un humo muy tóxico y que ha obligado a los bomberos a actuar casi a ciegas y equipados con respiradores.

Después de trabajar sin descanso durante seis horas horas, las llamas bajaron de intensidad y después se procedió a su control. Además, la rápida intervención de los efectivos evitó que las llamas se propagaran y afectaran a otros desguaces próximos.

Ahora es el turno de los investigadores. De esta forma las pesquisas determinarán el origen de un fuego ante el que los bomberos de Málaga han demostrado su valía y que afortunadamente ha podido ser extinguido sin consecuencias graves.

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