Secciones
Servicios
Destacamos
En sala, ante los magistrados de la Audiencia Provincial de Málaga, el procesado ha reconocido haber cometido todos y cada uno de los hechos por los que se sentaba en el banquillo de los acusados. En concreto, según han precisado las fuentes judiciales consultadas, abusar ... de la hija de su pareja y tomar varias fotografías con la menor.
Ocho años y medio después de los hechos, la Audiencia Provincial ha celebrado este jueves el juicio por este caso. En la sesión, el procesado aceptó los hechos tal y como los describe la Fiscalía, que relata dos episodios. El primero, por orden cronológico, ocurrió en una fecha indeterminada cuando la víctima –que es fruto de una relación anterior de la madre– era menor de edad.
El acusado, que en aquel entonces tenía 32 años, recogió un día a la niña de las clases particulares a las que asistía, la llevó a la bodega de una finca de sus padres y abusó sexualmente de ella. Tras ello, volvió con la cría al domicilio familiar, donde le esperaba su pareja.
El segundo episodio ocurrió el 22 de septiembre de 2012 durante una barbacoa en la casa de los padres del procesado, situada en un municipio de la provincia de Málaga. Tal y como reconoció ayer, el acusado se tuvo que ausentar un rato para ir a su domicilio y se llevó con él a la menor, que entonces tenía 12 años.
Una vez en la vivienda, le dijo que subiera a la habitación principal y que se quitara la ropa, tras lo que abusó sexualmente de ella por segunda vez. Aunque lo interrumpió una llamada de teléfono, que atendió en la planta baja de la vivienda, justo después continuó e incluso le puso una película pornográfica a su hijastra mientras le explicaba cómo llevar a cabo determinados actos de índole sexual, para los que se valió de la relación que tenía con ella.
Durante estos hechos, el hombre cogió su teléfono móvil y, «con fines pornográficos y para satisfacer sus instintos sexuales», tomó dos fotografías de los abusos sexuales sobre la menor. Después, ambos volvieron a la barbacoa familiar.
Tras ese segundo episodio, la entonces pareja del acusado, y madre de su hijo pequeño, halló estas imágenes al mirar el teléfono móvil de éste. Aunque en la foto no se veía el rostro de la pequeña, ella reconoció inmediatamente el cuerpo de su hija y denunció inmediatamente los hechos a la policía, que detuvo al sospechoso.
El acusado ha estado en prisión provisional durante más de dos años, concretamente, desde el 2 de octubre de 2012 hasta el 18 de diciembre de 2014. En el juicio, que ha pasado por varias suspensiones, el hombre se enfrentaba a una posible condena a 21 años de cárcel. Sin embargo, la Fiscalía finalmente ha solicitado en la sesión de este jueves una pena para el procesado de dos años y nueve meses de prisión.
En este sentido, la representante del Ministerio Público ha expuesto que se dan las circunstancias atenuantes de dilaciones indebidas y reparación del daño, ya que el acusado, representado por la abogada Cecilia Pérez Raya, ya ha consignado una cantidad económica para hacer frente a la indemnización que corresponda a la víctima –que ya es mayor de edad– y a su madre.
Por su parte, la acusación particular, ejercida por la madre de la menor y representada por el abogado Francisco Damián Vázquez, se ha adherido a la postura de la Fiscalía.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.