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Sucedió sobre las tres de la madrugada en un salón de juegos de El Palo. Un hombre fue detenido por efectivos de la Policía Local de Málaga después de que, presuntamente, amenazara de muerte a la encargada del mismo y se dedicara a pegar patadas a la entrada del establecimiento, en actitud muy violenta.
Al parecer, los trabajadores le impidieron la entrada porque solo hacía unas noches que había causado problemas en el negocio. De hecho, en esa ocasión también dieron aviso a la policía, pero para cuando los agentes se personaron el hombre ya se había dado a la fuga.
Según las fuentes consultadas, el hombre regresó cuatro días después, ante lo que le vetaron el acceso. Supuestamente, reaccionó amenazando a la encargada, diciéndole que la iba a matar cuando saliera de trabajar por no dejarle pasar, lo que causó miedo a la mujer ya que, al parecer, el individuo sería conocido en el barrio por sus antecedentes.
A continuación, el sospechoso se marchó pero regresó al cabo de un rato, cuando los efectivos se encontraban en el interior del mismo. Supuestamente, mientras los agentes tomaban declaración a los testigos, el sospechoso regresó y se quedó apoyado en actitud desafiante apoyado en la entrepuerta.
Los funcionarios le leyeron sus derechos y lo llevaron detenido por las amenazas.
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