Archivan la causa contra 27 investigados en una macrooperación contra el crimen organizado irlandés en la Costa del Sol

Más de treinta detenidos y 122 registros en España, Irlanda y Reino Unido. Fue el balance de la 'operación Shovel', llevada a cabo entre los años 2008 y 2010 bajo la dirección del Juzgado de Instrucción Número 3 de Estepona, que dio como resultado el mayor golpe del momento al crimen organizado irlandés en España. Fuentes del Ministerio del Interior apuntaron en su día que Europol atribuía a esta red una veintena de delitos de sangre en diferentes puntos de la geografía europea. Ahora, el mismo juzgado a decretado el sobreseimiento provisional contra 27 de los imputados por blanqueo de capitales y asociación ilícita, al considerar que no ha quedado probada la existencia de delito.

El juzgado mantiene abiertas las diligencias contra cinco de los investigados por otros crímenes de los que sí se han encontrado indicios suficientes –tenencia ilícita de armas y falsedad documental entre otros–. Entre los que siguen bajo el foco de la Justicia se encuentra el que la policía considera presunto cabecilla de la red, Christopher K., conocido como 'Christy', que en el momento de la detención tenía 53 años.

Con este auto, difundido este miércoles por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) se pone un punto y aparte a la 'operación Shovel', que en el año 2010 ocupó las portadas de la prensa internacional al ser considerado la mayor acción de cooperación policial del momento contra este tipo de redes criminales. La banda desmantelada estaba considerada como una de las de mayor peso a escala internacional, principalmente en las islas británicas, con conexiones en una veintena de países.

La investigación se originó a raíz de la instrucción de un asesinato (atribuido a la banda): Patrick D., un ciudadano irlandés de 28 años al que los agentes vinculaban con el crimen organizado, murió por el impacto de varios disparos en una emboscada llevada a cabo en una urbanización de Estepona.

A raíz del asesinato, el juzgado de instrucción abrió el foco hacia otros delitos, como blanqueo de capitales (que ahora queda en suspenso tras el auto de sobreseimiento). Durante la ejecución de la operación se intervinieron un centenar de propiedades de lujo vinculadas a la actividad de la red criminal.

El Grupo Udyco de la Costa del Sol de la Comisaría Local de Estepona y el Grupo de Crimen Organizado de la Comisaría Provincial de Málaga del Cuerpo Nacional de Policía fueron los encargados de dirigir la investigación en colaboración con las autoridades internacionales, acción policial que derivó en los 122 registros llevados a cabo de forma prácticamente simultánea en el suelo de varios países.