Apuñalado al intentar recuperar por la fuerza un piso okupado en Estepona

La Policía Nacional trata de esclarecer un enfrentamiento con armas que tuvo lugar en un edificio de Estepona y que ha acabado con cuatro detenidos y dos heridos de arma blanca, uno de ellos muy grave al recibir varias puñaladas en la cabeza y en el cuello. Fuentes de la Policía Nacional indicaron que dos de ellos estaban en el interior de la vivienda y otro acudió a la misma, acompañado de la persona que ha sido detenida en la mañana de este jueves. A los arrestados se les imputan delitos de riña tumultuaria, lesiones y allanamiento de morada, según el caso.

El motivo de la pelea, según las primeras pesquisas, fue que un grupo de personas -entre las que se encontraría el hombre que salió peor parado del enfrentamiento- pretendía recuperar por la fuerza una vivienda okupada en la localidad.

Los hechos sucedieron minutos antes de las dos de la madrugada del martes al miércoles 2 de octubre en la calle Archidona del municipio costasoleño. El sistema de emergencias 112-Andalucía recibió una llamada que alertaba de que se estaba produciendo una discusión de pareja.

Cuando llegaron las primeras patrullas al lugar, el escenario que encontraron era dantesco. Había sangre por todas partes y dos heridos. A uno de ellos, el que presentaba las lesiones más graves, lo encontraron en el garaje del inmueble, adonde había logrado huir mientras le permitieron las fuerzas. Tenía lesiones de arma blanca en la cabeza, el cuello y las manos.

Los policías pidieron una ambulancia para que fuese evacuado urgentemente a un centro hospitalario, ya que, aparte de las zonas vitales donde había sido apuñalado, también había perdido mucha sangre durante su huida. En el inmueble, localizaron a otro hombre que tenía heridas de arma blanca en las manos.

Los agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana identificaron a todos los implicados y se entrevistaron con algunos de ellos para intentar aclarar lo sucedido. Ahora, la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) tirará del hilo de esos primeros testimonios para reconstruir lo que ocurrió en la vivienda.

Según esas primeras pesquisas, el piso en liza pertenecería a una mujer, que había convivido allí con su pareja. Cuando la relación se rompió, ella se marchó y él se quedó en la vivienda, supuestamente, como okupa. La noche de autos se encontraba con un primo.

Al parecer, mientras ambos se encontraban en el piso, un grupo de hombres -cuatro o cinco- accedió al mismo a través de una ventana. La intención de los asaltantes era -siempre según las pesquisas- echarlos del inmueble y recuperarlo para la mujer.

La investigación trata ahora de determinar la relación de parentesco de alguno de los asaltantes con la mujer y si, como apuntan algunas fuentes, ella le habría pedido ayuda a alguien de su entorno para expulsar a su ex y al primo de este de la vivienda.

Sea como fuere, los asaltantes supuestamente comenzaron a agredir a los dos primos para que abandonaran el domicilio, pero, lejos de hacerlo, éstos reaccionaron armándose con cuchillos y enfrentándose con el grupo. La mayoría huyó, pero lograron darle alcance a uno, que es el que sufrió las lesiones más graves. Es el hombre al que la policía encontró en el garaje.

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