Líquido de lavavajillas y otros trucos para acabar con las manchas más terroríficas de Halloween

Termina la fiesta de Halloween y ¡terrooooor! Una indeseable mancha de esa sangre falsa con la que se pretendía dar realismo al disfraz de zombie; o de ese maquillaje (para más señas 'waterproof') con el que se consiguió la caracterización perfecta de Morticia Addams; o de esos caramelos con los que los más pequeños de la casa llenaron sus calabazas. La noche más misteriosa del año puede dejar en la ropa huellas más difíciles de eliminar que los sustos de la víspera de Todos los Santos.

Pero no todo son malas noticias. Existen algunos trucos que facilitan la limpieza de las prendas antes de que cunda el pánico. Eso sí, dos pequeños consejos antes de entrar en materia: nunca se debe frotar la mancha, o solo se logrará extenderla aún más, y siempre hay que tratar de actuar lo más rápido posible.

Los maquillajes que se utilizan en Halloween suelen ser resistentes al agua o permanentes, con una base grasa más potente que penetra con facilidad en las fibras de los tejidos dando lugar a unas manchas difíciles de quitar. Hay una solución al alcance de la mano en los hogares: el líquido de lavavajillas. Su fuerte capacidad antigrasa hace que sea un producto muy eficaz para eliminar las manchas de maquillaje. Lo recomendable es meter la prenda en la lavadora poniendo 15 mililitros de este producto en el cajón.

Cualquier persona que haya usado alguna vez la sangre falsa para dar un mayor realismo, incluso, un punto 'gore' a su disfraz lo sabe. Además de extenderse con gran facilidad, deja unas manchas intensas que pueden afectar también a la ropa de quien está realizando la caracterización. Para quitar manchas de sangre falsa seca, nada mejor que el bicarbonato. Hay que preparar una mezcla de dos cucharadas pequeñas de bicarbonato en 50 mililitros de detergente, aplicarlo sobre la zona afectada y dejar reposar la solución durante unos 20 minutos. Después, solo hay que lavar la prenda en la lavadora.

Si el culpable de esa mancha, a priori difícil de eliminar, son los caramelos, lo primero que hay que hacer es retirar todos los restos de dulce que se pueda. Acto seguido, llenar un barreño con agua tibia, vinagre blanco de limpieza y limón, y sumergir la prenda en esta mezcla, como mínimo unos 30 minutos antes de lavarla en la lavadora.

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