¿Covid o alergia?: estos son los síntomas que marcan la diferencia

En apenas un mes, la incidencia de covid en España se ha multiplicado por cuatro. Si bien es cierto que el ascenso de infecciones no se está traduciendo en un número masivo de ingresos hospitalarios, lo cierto que los casos de positivos están experimentado un crecimiento, que ya se está dejando notar también en las farmacias donde se han disparado la venta de test de antígenos.

Según los farmacéuticos, muchas de las personas que adquieren las pruebas lo hacen por precaución, principalmente porque tienen síntomas de alergia, que se parecen a los del covid, y lo quieren descartar. Mientras que en el caso de la gripe y el covid los síntomas son muy similares, con un episodio de alergia las diferencias son más notables.

Detrás de este nuevo repunte de contagios por covid se encuentra la BA.2.86, más conocida como pirola, una subvariante de ómicron, el linaje que ha encabezado la mayoría de los nuevos contagios desde su aparición en diciembre de 2021.

Al igual que otras variantes de ómicron, los síntomas más habituales de pirola son la fiebre, dolores musculares, cansancio, tos, dolor de garganta, congestión nasal, estornudos, dolor de cabeza , dificultad respiratoria y, en menor medida, pérdida de olfato.

En el caso de la alergia, ya sea por pólenes u otros aeroalérgenos, como los ácaros del polvo, hongos de la humedad y epitelios de animales, los síntomas más comunes son la rinitis alérgica (estornudos, mucosidad nasal, picor y taponamiento), la conjuntivitis alérgica (lagrimeo, enrojecimiento de la conjuntiva y picor ocular) y, en algunas personas, también puede derivar en asma, con tos seca -sobre todo por la noche-, sibilancias y dificultad para respirar.

Por lo tanto, a diferencia del covid, en la alergia los signos más significativos son el picor de ojos y nariz, con estornudos y mucosidad normalmente transparente y muy fluida y, si se cursa con asma, esta se presenta con tos seca y sibilancias; mientras que la fiebre y los dolores musculares son inexistentes y, rara vez, provoca dolor de cabeza o de garganta.

Desde el Ministerio de Sanidad, han querido nuevamente sensibilizar a los ciudadanos sobre las precauciones a adoptar ante el aumento de contagios, sobre todo, para proteger a las personas más vulnerables.

Así, recomiendan cubrirse la nariz y la boca al toser o estornudar; usar pañuelos desechables para contener las gotitas respiratorias o las secreciones y, tras su uso, depositarlos en la bolsa de basura más cercana; y lavarse regularmente las manos con agua y jabón o con gel hidroalcohólico, sobre todo, después de tener contacto con secreciones respiratorias.

Ante la sospecha de infección, Sanidad aconseja el uso de mascarilla y evitar la interacción social.

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