La OCU explica el significado de la intensidad del café de cápsulas

Según indica esta organización, la intensidad es un término que solo se usa en la cata de café para determinar las características olfativas y gustativas del mismo, es decir, el grado con el que se perciben los aromas en nariz y boca. Por este motivo, la intensidad es independiente de la cafeína que pueda contener un producto en concreto y hay muchos factores que incluyen ella. Entre otros, figuran el origen del grano, el tipo de molido y de tueste, el método de extracción, el agua, la limpieza de la cafetera, la cantidad de café molido y el tiempo de infusión, además de la cafeína.

Algunos fabricantes indican la intensidad con adjetivos: forte, intenso... En cambio, otros emplean números como por ejemplo 5, 8, 10. Pero la intensidad no es un parámetro que esté estandarizado, sino que cada fabricante usa su propia escala: dos cafés de diferentes marcas y con el mismo número de intensidad no tienen por qué equipararse. Por tanto, que un café indique que es intenso no nos va a ser muy útil a los consumidores si en el envase no se muestra la escala o referencia que emplean para designar la intensidad.

Lo ideal sería que se consensuase un sistema común para indicar la intensidad del café, de manera que todos entendamos cuánto puede variar, cuál es el valor mínimo y cuál el máximo. Mientras se accede a esta petición, desde la Organización de Consumidores y Usuarios solicitan al menos, indiquen la escala que están empleando, pues no todos lo hacen.

Para obtener un buen café, también conviene conocer los mililitros o el tamaño de taza recomendado para cada variedad, ya que dejar pasar más o menos agua va a condicionar, y mucho, la percepción de las propiedades sensoriales del café. Hay cápsulas que aparecen como indicadas para hacer un espresso (unos 40 ml por taza), y otras especiales para cafés más largos, hasta 110 ml.

Desde la OCU recuerdan que las barritas indicadoras que aparecen en las cajas de algunas cápsulas ayudan al consumidor a ajustar el tamaño de la taza. Por esta razón, es conveniente fijarse en lo que señala el fabricante y seguir sus indicaciones al poner en marcha la cafetera para elegir un café corto o largo.