Senderismo: una ruta desde Riogordo a Alfarnate

Comarca: Axarquía

Municipio: Riogordo

Nivel de dificultad: Media. Esta ruta es claramente ascendente y tiene algún tramo inicial en el que hay un desnivel considerable. Pese a ello, no se puede considerar de dificultar alta, ya que el camino se atenúa posteriormente y siempre discurre por camino ancho y relativamente cómodo. Se puede hacer en bicicleta, siempre y cuando se tenga cierta experiencia y una buena forma física.

Tipo de ruta: Lineal

Duración aproximada: 2 horas y 15 minutos (sólo ida)

Longitud: 7,8 kilómetros (sólo ida)

Altura mínima: 379 metros

Altura máxima: 660 metros

Lugares de interés próximos: Museo Etnográfico de Riogordo, iglesia de la Virgen de Gracia, Cortijo de Auta y los tajos de Gomer, Doña Ana y El Fraile.

Para comenzar esta ruta hay que dirigirse hasta el municipio de Riogordo. En concreto, habría que buscar la rotonda en la que se homenajean a los caracoles de la localidad, es decir, donde confluyen el paseo de Andalucía, el camino del Bujeo y la calle Blas Infante. En la segunda de estas vías, se podrá ver el cartel de inicio de la décima etapa de la Gran Senda de Málaga. Para aparcar, lo idóneo es buscar estacionamiento en el entorno de la calle Blas Infante.

1Esta ruta de senderismo arranca donde lo hace oficialmente la décima etapa de la Gran Senda de Málaga, que une a Riogordo con Alfarnatejo y Alfarnate, ya que va a usar el mismo trazado, aunque, en este caso, se finaliza en el Nacimiento del Borbollón, justo después de pasar por el Cortijo de Auta. Así, tras ascender unos primeros metros por el camino del Bujeo, que es un tramo de carretera, hay que desviarse a la izquierda por el camino de la Solana, que es un carril de tierra ancho.

2Durante algo más de kilómetro y medio el camino será prácticamente llano. Pero, una vez que se pasa por el túnel que sirve para salvar la carretera A-356 por debajo, aguarda el tramo más exigente de esta ruta de casi ocho kilómetros de longitud. En concreto, habrá que enfrentarse a un trazado de un kilómetro de longitud, en el que se supera un desnivel de 150 metros de elevación. Así, tras llegar prácticamente al tercio del recorrido (unos 2,6 kilómetros), el camino se hace llano e incluso descendente en los primeros metros del segundo tercio.

3En los siguientes kilómetros el camino irá en sentido este o norte, bordeando así por un carril de tierra ancho, esta parte de la conocida como Sierrecilla del Rey, en territorio de Riogordo. Esto hará posible que se vaya viendo al sur una amplia panorámica, donde se podrán ver puntualmente los cascos urbanos de Riogordo y Colmenar (más al oeste). En este segundo tercio, no hay tramos muy exigentes, aunque la subida viene a ser muy continua. Se atraviesa un espectacular olivar de montaña.

4En el último tercio del camino, se camina en sentido norte, bordeando algunas fincas y casas rurales, hasta que se llega al Cortijo de Auta, uno de los rincones singulares declarados por la Diputación Provincial de Málaga. Este enclave, que hoy se visualiza sobre todo por un cortijo parcialmente en ruinas, es conocido entre otros motivos por un asentamiento de población e incluso una antigua fortaleza, que hoy sólo se puede intuir. Además, hoy se señala este sitio para determinar el lugar de nacimiento del rebelde Omar Ben Hafsún, conocido por desafiar el poder de los Omeyas en el ecuador del antiguo Al-Ándalus.

5Tras pasar por el Cortijo de Auta, donde el camino se une al río de la Cueva, el sendero continúa en sentido Alfarnatejo hasta lo que se conoce como el Nacimiento del Borbollón. Hoy allí no hay que buscar una surgencia de agua, que existía antaño, sino más bien las vistas privilegiadas al conjunto de los tajos más famosos de la Alta Axarquía, los de Doña Ana, Gómer y El Fraile, claramente visibles también desde el territorio de Riogordo.

6Una vez que se llega al Nacimiento de Borbollón, toca regresar por el mismo camino usado para la ida. Existe la opción también de llegar hasta Alfarnatejo o Alfarnate para terminar la décima etapa de la Gran Senda de Málaga. Pero, para ello habrá que asegurarse de que hay tiempo para regresar al punto de partida. En este sentido, también se pueden bajar opciones de regreso en autobús interurbano entre estos municipios. Para ello habría que consultar los horarios con cierta antelación.

En esta ruta de senderismo se puede disfrutar de cierta biodiversidad gracias a los distintos paisajes que tiene Riogordo y, más concretamente, la Sierrecilla del Rey. Por un lado, en el entorno de las abruptas formaciones calizas se pueden ver algunas rapaces y rupícolas. Por otra, hay también un valioso ecosistema en el olivar y los campos de cereales junto a los que se camina. A ello hay que unir las riberas, que se cruzan o que acompañan por el camino, como es el caso del río de la Cueva. Por tanto, se pueden ver o escuchar desde ranas, abubillas, cernícalos, collalbas, zorros, jabalíes, cabras monteses o tejones, entre otras especies animales. En lo que se refiera a flora, además de los mencionados olivos, hay acebuches, encinas y pinos, entre otros árboles. A ello hay que unir distintos matorrales y plantas aromáticas, como el matagallos, el tomillo o el romero, entre otras.