Senderismo Málaga: Ruta Charamuza – Lo Bernabé

Esta ruta circular sale y termina en Almogía. Se trata de un itinerario relativamente cómodo, que forma parte de la red de Senderos de Naturaleza de este pueblo malagueño.

El punto de partida de esta ruta, al igual que otros itinerarios de esta localidad, está en su propio casco urbano. Concretamente, entre el albergue local y la Posada de Almogía, en la travesía urbana, se encuentra el arranque oficial tanto de ésta como de otras rutas, como una de las etapas del Camino Mozárabe o la que va hasta el Llano del Espinar (COORDENADAS 36.830272, -4.541189). Para llegar hasta allí se puede ir desde la barriada malagueña del Puerto de la Torre en un trayecto que no supera los 20 minutos. Otra opción más compleja es ir desde el nordeste desde Casabermeja, a través de la pedanía de Arroyo Coche.

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Este itinerario circular no ha de confundirse con la ruta que lleva hasta Santi Petri, que es lineal, y que coincide en los primeros metros con este camino, siempre y cuando se comience desde las inmediaciones del albergue. Allí, en las inmediaciones del punto de partida de ambas sendas, donde hay una parada de transporte público interurbano, es fácil aparcar. Desde allí habrá que iniciar el camino hacia el casco urbano para después girar, siguiendo siempre las indicaciones, hacia el cuartel de la Guardia Civil. Desde allí, el camino comenzará a descender, poco a poco, hacia la ribera del arroyo Cupiana, donde se encuentra el punto más bajo de este itinerario.

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Una vez que se cruza el arroyo Cupiana, normalmente sin dificultades por llevar poca agua, se comienza un ascenso continuo hacia Santi Petri. En un primer momento, se pasa junto a un antiguo cortijo abandonado -la 'casa de Juan Matas'-, situado junto al río. Después, el camino asciende hasta un carril de tierra donde pueden circular vehículos. Hasta ahí este itinerario comparte carteles e hitos con la antes mencionada de Santi Petri. En el caso de este itinerario circular habrá que obviar la salida que hay a la derecha por un sendero angosto y ascendente. En cualquier caso, ante la duda habrá que tener en cuenta que los hitos que marcan la subida a Santi Petri usan flechas rojas, mientras que la otra están pintadas en verdes.

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Este itinerario continúa en claro ascenso hasta el punto más elevado de esta ruta, pero para ello antes cruzará el conocido como arroyo de los Retamales. Después, se llega al cénit de este itinerario y comienza un acentuado descenso que lleva de nuevo a cruzar el curso del arroyo Cupiana. En la bajada hacia su curso se podrá apreciar unas bonitas vistas del casco urbano y de su torre de la Vela, único resto que queda de la antigua fortaleza andalusí. Según se va bajando al arroyo y tras cruzarlo, se tendrá una espectacular vista del conocido como Tajo de la Rambla. Aunque también se ve en la primera parte del camino, en cuanto se deja atrás Almogía, no cabe duda de que las vistas que se tienen en la parte final son mucho más interesantes.

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Tras cruzar el arroyo Cupiana por un puente poco llamativo, se llega al punto más bajo de esta ruta. Desde allí habrá que emprender la subida más dura del camino, con más de 170 metros de desnivel en poco más de un kilómetro. Eso sí, buena parte de ese recorrido será ya urbano, ya que tras pasar por Los Almendrales (se deja a la izquierda una casa rural con ese nombre), hay que penetrar en el pueblo a través de la calle Marcelo San Esteban, que desemboca en la plaza principal del pueblo, donde tiene su sede el Ayuntamiento de Almogía. Desde ahí habrá que seguir subiendo, primero por calle Iglesia, pasando junto a la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, y después por las calles Nazareno y San Sebastián, que llevan hasta una de las ermitas de la localidad. Desde esta antigua capilla se llega a la carretera de circunvalación del pueblo por la calle Carril. Una vez en la carretera, habrá que ir hacia la izquierda para llegar al punto de partida.

Aunque Almogía pertenece oficialmente a la comarca del Valle del Guadalhorce, cuenta con un paisaje muy singular en su entorno. Gracias a eso, se pueden ver desde rebaños de cabra montés en lo alto del tajo de la Rambla o águilas perdiceras sobrevolando sus cielos. Por su parte, la flora es igualmente diversa. Entre otras plantas y árboles, en el sendero y en su entorno se pueden ver palmito, lentisco, algarrobo, álamo blanco, espino negro, higuera, almendro, acebuche, olivo, encina, adelfa, coscoja, jara blanca, matagallo y cebolla albarrana, entre muchas otras especies botánicas.