Ruta senderista: Cártama-Torrealquería

Esta ruta de senderismob circular homolagada (PR-A-294) parte del municipio de Cártama para hacer una pequeña incursión en el término municipal de Alhaurín de la Torre. Para ello, recorre en ambos sentidos la sierra de los Espartales.

El punto de partida de esta ruta está en Cártama Pueblo. En concreto, habrá que dirigirse a la zona alta para buscar la subida de la ermita de la Virgen de los Remedios (COORDENADAS 36.709459, -4.631316). Para llegar hasta este punto hay que adentrarse en el entorno de este pueblo del Valle del Guadalhorce hasta la zona situada en el entorno de la iglesia de San Pedro para estacionar el vehículo. No siempre será fácil encontrar aparcamiento cerca, pero sí a pocos metros en zonas menos urbanizadas.

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Esta ruta, que está homologada por la Federación Andaluza de Montañismo con la nomenclatura PR-A-294, discurre en buena parte por el término municipal de Cártama, aunque permite tener unas vistas privilegiadas en algunos puntos del Valle del Guadalhorce. Este itinerario se cruza con otra ruta circular, la PR-A-295, lo que obliga a prestar especial atención a la señalética para no confundir ambos caminos.

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Una vez estacionado el vehículo, hay que comenzar la subida peatonal que lleva hasta la ermita de los Remedios y el castillo de Cártama. Estos primeros metros sirven para superar un desnivel considerable que conlleva como recompensa unas bonitas vistas al valle y pasar junto a la citada capilla, declarada como Bien de Interés Cultural. Igualmente, se pasa a los pies del castillo.

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Tras recorrer el paseo peatonal empedrado, el camino llega hasta un carril de tierra ancho, donde hay una encrucijada de senderos. Habrá que girar a la izquierda y descender algunos metros por este camino ancho, donde ocasionalmente circulan vehículos. De esta forma, se comienza a rodear las faldas de la sierra de Espartales. Eso sí, pocos metros más adelante habrá que subir por un tramo especialmente empinado, ya que se salvará un desnivel de unos 100 metros para llegar a la cota más alta de la ruta, que roza los 400 metros de altitud.

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Tras casi tres kilómetros de recorrido, el camino comienza a hacer un descenso cada vez más pronunciado. En esta zona, se pasa junto a la finca de Viñas Viejas, conocidas por la elaboración de los vinos Cartima S.XXI. Justo de allí, el descenso, siempre por carril, se introduce en una zona de huertas y árboles de regadío hasta desembocar en el cruce con la aldea de Torrealquería. Si bien la ruta oficial no pasa por este diseminado de Alhaurín de la Torre, no se debe eludir una visita a esta pequeña población, siempre y cuando se recupera la senda por el mismo camino. De esta forma, el sendero continua y pasa junto a otro de los hitos importantes de este itinerario, la antigua Hacienda de la Alquería, conocida por haber sido el refugio del general Torrijos y sus soldados en el intento fallido de su Pronunciamiento. Actualmente, el edificio donde fue apresado este militar liberal está en ruinas, aunque es posible acercarse a pie.

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Desde el refugio de Torrijos hay que continuar por el carril ancho, desde el que se ve en lontananza, a la izquierda, el pueblo de Alhaurín El Grande. Habrá que estar especialmente atentos para tomar un desvío a la derecha que conduce hacia Cártama. En unos primeros metros el camino es llano, pero pronto comienzan a salpicarse tramos algo más duros, que en algunos casos, son de hormigón. De esta forma, tras cerca de una hora a pie se llega hasta la encrucijada de senderos que está situada a las espaldas del castillo de Cátama.

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Si no hay mucho cansancio acumulado, antes de descender por el camino de la ermita, se puede tomar un desvío que hay a los pies de la fortaleza, que conduce hasta la parte alta del castillo, donde se pueden tener unas vistas excelentes del Bajo Guadalhorce. Desde allí, se ve incluso el pueblo de Almogía, situado ya en las estribaciones de los Montes de Málaga.

La sierra de los Espartales cuenta con un amplio repertorio de cultivos tradicionales, como almendros, vides, chumberas, olivos o acebuches, que conviven en el paisaje con otras especies vegetales, como el palmito, el tomillo, el romero, el enebro o el hinojo, entre otros. También se pueden ver algunos algarrobos a lo largo del camino. En lo que se refiere a fauna, se avistan ocasionalmente aves como el vencejo, la collalba negra, el cernícalo común o incluso algunas aves rapaces de mayor tamaño. También se pueden avistar algunos mamíferos de pequeño tamaño, como algunos roedores, y algunos reptiles, como lagartijas o culebras.