Ruta del Tajo de la Sabia

Tipo de ruta: Semicircular

Duración aproximada: 2 horas y 30 minutos

Longitud: 6,2 kilómetros

Altura mínima: 282 metros

Altura máxima: 758 metros

Lugares de interés próximos: Estupa budista, Mariposario de Benalmádena, Jardines de la Muralla, castillo de Colomares y casco antiguo de Benalmádena Pueblo.

Para comenzar esta ruta hay que dirigirse hasta Benalmádena Pueblo. Concretamente, si se viene desde Málaga o Torremolinos, habrá que desviarse por la calle Luis Cernuda, para llegar hasta el parque infantil del mismo nombre. Justo a unos metros de este recinto se encuentra el cartel inicial de esta ruta. Para estacionar el vehículo habrá que buscar en las calles aledañas, tanto en las urbanizaciones próximas como en las inmediaciones del colegio Jacaranda, situado a tan sólo 50 metros del punto donde comienza la ruta.

1El cartel explicativo e inicial de este sendero homologado está justo al lado de una pequeña verja, que habrá que abrir para descender por una escalera. Ésta comunica con un túnel, que es necesario atravesar para salvar la autovía del Mediterráneo. De esta forma tan atípica comienza esta ruta. Tras unos ochenta metros de túnel, se comienza a caminar ya sobre tierra. El sendero se enfrenta ahí justo a su primera bifurcación. Habrá que continuar recto y obviar el camino de la derecha, que es el indicado para la etapa de la Gran Senda de Málaga y para el regreso de esta ruta. Por tanto, habrá que fijarse en las balizas con las franjas blanca y amarilla, correspondiente al pequeño recorrido del Tajo de la Sabia (PR-A-57). Tras unos veinte metros habrá que hacer un giro a la izquierda para atenuar la subida. Justo ahí se verá un panel indicativo de flora y fauna que se puede ver en esta ruta.

2Tras unos metros relativamente cómodos, el sendero pasa a usar el cauce seco de una antiguo arroyo para continuar ascendiendo. Este tramo es el primero de los pedregosos que se van an encontrar en este recorrido. Después de avanzar algunos metros, habrá que dejar este arroyo sin agua para girar a la derecha. Hay una baliza indicativa y una vieja fuente que sirven para avisar al senderista.

3El camino atenúa la subida durante unos metros y se mete de lleno en un espeso pinar, lo que proporciona bastante sombra. Después, el recorrido se va despejando de arboleda y haciéndose algo más duro. Hay que afrontar un camino relativamente exigente, hasta llegar a los 500 metros sobre el nivel del mar. El recorrido, que en parte zigzaguea ya tenúa la subida, permite ahí disfrutar de bonitas vistas del mar desde estas montañas, que están dentro del complejo de la Sierra de Mijas.

4La subida continúa con cierto desnivel hasta llegar a una encrucijada de caminos, que es seguramente el hito más importante del sendero. Ahí se señaliza a la derecha el camino de vuelta y el sentido de la etapa de la Gran Senda de Málaga que une a Mijas con Benalmádena. Sin embargo, no es el momento de hacer ese giro, ya que a esta ruta aún le queda casi un kilómetro y medio más de vida (más otro tramo igual de vuelta). El sendero continúa, por tanto, a la izquierda, con una subida que se hace más llevadera gracias a que se adentra en otro frondoso pinar. Entre los árboles se ven justo en frente las formaciones calizas que dan nombre a esta ruta. El sendero continuará hasta que se encuentre el cartel descriptivo de esta ruta.

5Una vez que se llega al cartel descriptivo de este sendero homologado toca regresar a la encrucijada antes mencionada. Para ello, habrá que volver por el mismo camino. De ahí, que esta ruta no sea plenamente circular, ya que este tramo se puede considerar lineal. Tras casi kilómetro y medio de descenso por el mismo camino, que tiene partes algo arenosas, se llega a la intersección que se dejó atrás anteriormente. Aquí habrá que tomar el camino que queda a la izquierda ahora, ya que el de la derecha corresponde con el usado en la subida.

6Los últimos metros de este sendero son claramente descendentes, pero esto no implica que sean fáciles. En este caso, el principal problema lo representan las muchas piedras sueltas, al igual que en la ida. En la bajada, son un contratiempo que pueden ralentizar mucho el ritmo. Habrá que tener mucha precaución al pisar para evitar resbalones o caídas. Tras un kilómetro de descenso algo pronunciado, el camino vira a la derecha para ir en paralelo a la autovía. Tras unos quinientos metros de subidas y bajadas leves se llega al acceso al túnel atravesado en la ida. Justo después, se llega al punto de partida oficial de este camino homologado como PR-A-57.

Al pertenecer al complejo de la Sierra de Mijas, estas montañas albergan una gran biodiversidad, lo que no siempre se podrá percibir en una ruta de estas características. Con algo de suerte y mucho silencio, se podrán avistar algunos mamíferos, como la cabra montés. Más complicado será notar la presencia de jabalíes, tejones y zorros. También pueden verse algunas aves rapaces e incluso reptiles de gran tamaño, como la culebra de herradura. En lo que se refiere a flora, hay mucha variedad, desde pinos a palmitos o plantas aromáticas, como el tomillo, el romero o el almoradú. Otras especies botánicas de interés son la coscoja o la aulaga.