Ruta de senderismo: Frigiliana-Cruz de Félix

El punto de partida de esta ruta está en el propio pueblo de Frigiliana. Antes de entrar a su casco antiguo, frente al edificio del Ingenio (donde se elabora la miel de caña), se encuentra la salida oficial para este itinerario circular (COORDENADAS 36.790802, -3.894652). Desde allí sólo habrá que bajar por la calle Camino Boticario para enlazar con un carril hormigonado que conecta con el cauce del río Higuerón. Es recomendable dejar el vehículo estacionado en cualquiera de las zonas de aparcamiento que tiene habilitados Frigiliana en el entorno del casco urbano.

1. Una vez que se deja atrás el casco urbano por la calle Camino Boticario, se desciende hasta el cauce del río Higuerón, un afluente del Chíllar que suele estar seco en los últimos días del verano y buena parte del otoño, dependiendo de las precipitaciones caídas. A través del curso del río o de sus orillas habrás que ascender por su sinuoso recorrido hasta sobrepasar la gran alberca conocida como Pozo Batán.

2. Tras el pozo de Batán, habrá que estar muy atentos, ya que a unos 300 metros de allí, a la derecha, hay un panel indicativo que indica el sendero a seguir para llegar hasta el Chíllar, que coincide también con esta Ruta Azul y un tramo de la etapa de la Gran Senda de Málaga que une a Frigiliana con Nerja. Se trata de una subida bastante acentuada, que representa la parte más dura de este itinerario. Eso sí, el importante desnivel que hay que afrontar -casi 200 metros en menos de un kilómetro-, se atenúa con el recorrido zigzagueante de un camino que es estrecho y, en algunas zonas, muy pedregoso.

4. Tras ascender por este tramo, se llega a la cresta de una de las estribaciones de la sierra de Almijara. A un lado queda el valle del río Higuerón; al otro, el del Chíllar. El camino, a diferencia de otras rutas antes mencionadas, se dirige al punto más elevado de los alrededores, a través de un pequeño cortafuegos que termina en el cénit de este sendero local, la conocida como Cruz de Félix, de la que no queda nada, sólo un montón de piedras que señalan uno de los sitios míticos de estas sierras. Desde allí se ven las cotas más elevadas, pero también el Mediterráneo que baña a la Axarquía más oriental.

5. El camino aquí comienza la parte menos dura, que es de bajada, salvo algunos tramos. No por ello es más fácil técnicamente. El sendero es estrecho y se dirige hacia el sur por la misma cresta de la sierra durante algo más de un kilómetro. Después enlaza a la derecha con un carril que llega hasta el lugar conocido como el Carril de Pinto. Desde ese camino, relativamente ancho, se continúa por un sendero estrecho que desemboca en el río Higuerón, en un punto situado a unos trescientos metros río abajo por el que se accedió desde Frigiliana. Por tanto, sólo queda remontar el cauce hasta encontrar a la izquierda el vial hormigonado que asciende hasta el casco urbano, es decir, el mismo que se usó para descender al afluente del Chíllar.

6. Aunque usa en buena parte tramos de senderos conocidos, en el resto habrá que estar atento para no salirse del camino oficial. En algunas rocas están señalizados puntos de color azul que ratifican que se está por el buen sendero. También se recomienda llevar algún mapa o alguna aplicación móvil que permita orientarse en caso de dudas.

En el tramo de ribera del Higuerón se pueden ver especies vegetales como como adelfas o madreselvas, mientra que en la forestal, abundan pinos, palmitos y otras especies autóctonas del monte mediterráneo. En lo que se refiere a fauna, suelen verse ocasionalmente alguna cabra montés e incluso algún jabalí. También hay una gran variedad ornitológica, con especies de rapaces de distintos tamaños que forman parte del valioso ecosistema del parque natural de las sierras de Tejeda, Almijara y Alhama.

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