La Virgen de la Esperanza volverá a la Catedral casi nueve décadas después de su última y prolongada estancia en el templo mayor de la diócesis. En aquel entonces, entró el 18 de julio de 1931 para recibir culto provisional en un nuevo y más ... seguro establecimiento, la capilla catedralicia del Cristo de los Niños, hoy de San Sebastián, después de que su sede canónica, la parroquia de Santo Domingo, hubiera sufrido la destrucción total durante los tristes episodios conocidos como la quema de conventos, acaecidos en la madrugada del 12 de mayo, aunque no fue hasta agosto de ese año cuando el Cabildo accedió a la petición de residencia, por parte de la Archicofradía del Dulce Nombre de Jesús. Y regresó a Santo Domingo, en procesión triunfal y arropada por las hermandades que componían el concierto cofrade en aquel momento, en diciembre de 1938. Por tanto, siete años y cinco meses permaneció la Dolorosa perchelera en la iglesia mayor de la diócesis. Al culto, primero, presentando algunos deterioros visibles en el rostro y dedos de las manos y con nueva devanadera, y escondida, después, en la sacristía de la Catedral, que fue tapiada desde que estalló la guerra civil en 1936 hasta febrero de 1937, periodo que fue aprovechado por Adrián Risueño para efectuar la primera intervención importante.
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No obstante, la permanencia de la Virgen de la Esperanza en la Catedral en aquella década de los 30 del siglo pasado no fue un hecho aislado, ya que también encontraron refugio bajo sus naves las Vírgenes de los Dolores de la Expiración, de Servitas, Soledad de Mena y los titulares de la Hermandad del Sepulcro. Sin embargo, como asegura el historiador Andrés Camino, la archicofradía de la parroquia de Santo Domingo sí fue la primera corporación que expuso su imagen en el templo catedralicio y, por consiguiente, abrió el camino a las demás cofradías que hicieron lo propio. Y también fue la última en salir, dado que todas estas efigies emprendieron su marcha en 1935 y la Esperanza lo hizo a finales de 1938.
Con todo, 87 años después de atravesar por última vez la puerta de las Cadenas de la Catedral, la Dolorosa más antigua de la ciudad, la Virgen de la Esperanza volverá a pisar la que fue su casa, tal y como informó el hermano mayor de la corporación, Sergio Morales, a su equipo de gobierno durante durante la sesión 19 de la junta de gobierno ordinaria celebrada el pasado 17 de junio. En este sentido, Morales expuso, según recoge la propia archicofradía en sus canales oficiales, que el obispo Jesús Catalá daba luz verde a la celebración de un besamanos extraordinario, que tendría lugar en la basílica de la corporación, «como acto previo a la peregrinación a Roma», reveló. Este acontecimiento de primera magnitud se desarrollará en la ciudad italiana entre el 16 y el 18 de mayo del próximo año con motivo del primer Jubileo de las Cofradías, cuyo acto central contará con una procesión extraordinaria por sus calles, protagonizada por el Cristo de la Expiración, 'El Cachorro', de Sevilla, y la malagueña Virgen de la Esperanza, que figurará en su trono de Semana Santa.
Por otro lado, el hermano mayor de la entidad nazarena comunicó, igualmente, que la diócesis daba su beneplácito a que la Dolorosa, a su vuelta de Roma, «reciba culto en la Santa Iglesia Catedral Basílica mediante la celebración de un triduo extraordinario y función principal», informó Sergio Morales, para que, de esta forma, aquellos devotos que no puedan acompañar a la imagen en su estancia en Italia, tengan la posibilidad de acercarse a la Virgen en la Catedral, donde permanecerá varios días de forma extraordinaria. Faltaría, por tanto, conocer otros detalles, como los días, horarios y la forma de regresar de la talla mariana a su basílica, ya que todo apunta a que la Dolorosa será trasladada al templo catedralicio desde Roma, sin pasar por su sede canónica.
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De otra parte, la citada junta de gobierno también conoció de primera mano la existencia de un informe «pormenorizado» para su estudio, realizado por el albacea de la archicofradía Miguel Gutiérrez Jansen, en el que se pretende la recuperación de la calle Carretería para la procesión del Jueves Santo, vía por lo que discurre desde que se pusiera en marcha el actual recorrido oficial, en la Semana Santa de 2019.
Este informe «analiza la evolución histórica, progresión de los horarios, lo que ha supuesto la reforma urbanística de la calle, así como, un análisis comparativo de distancias, tiempo e inferencia de diferentes propuestas de itinerarios para que la archicofradía considere retomar la vuelta en su recorrido procesional por la calle Carretería, así como de eventuales ajustes que procedería hacer en la jornada del Jueves Santo», se expuso en la citada reunión, al tiempo que se añadió que este trabajo de Gutiérrez Jansen «también incluye un reajuste en los tiempos de paso de las distintas corporaciones del día en función del número de participantes», se advirtió a la junta de gobierno.
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Se pone encima de la mesa, pues, el regreso de la Archicofradía de la Esperanza a Carretería y la Tribuna de los Pobres, aunque, en realidad, se trata de un estudio que deberá analizar, en primer lugar, la junta permanente.
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