
Secciones
Servicios
Destacamos
Él conoce al Cautivo mejor que nadie, y el Cautivo lo cuida y lo guarda con el mismo amor con el que le ajusta los pliegues de su túnica y mide la caída de sus cíngulos. A sus 82 años, José Luis Palomo Gallardo se jubila esta Semana Santa como vestidor de la imagen del Señor de Málaga, una labor que ha ejercido durante 65 años y en la que comenzó siendo apenas un adolescente de 17 años que se afanaba en rascar con una espátula las gotas de cera de las velas de sebo que caían en el suelo de la parroquia de San Pablo. Así, desde lo más pequeño, comenzó su vida junto a Jesús Cautivo, al que vestirá por última vez para la procesión del Lunes Santo cuando finalice el traslado de este Sábado de Pasión.
Luego habrá algunos cambios más pero, cuando entre una nueva junta de gobierno, tras las elecciones que celebrará la cofradía una vez pasada la Semana Santa, cederá «los trastos» a un nuevo vestidor. «Tengo el título de albacea del Señor y seguiré estando, pero la responsabilidad será de otra persona, de quien designe la nueva junta de gobierno. Ya me retiro de la responsabilidad y le doy paso a la juventud que también se lo merece», afirma un emocionado José Luis Palomo a los pies de su Señor.
Asegura que en estos 65 años ha sido testigo de «cientos de milagros», y las lágrimas brotan de sus ojos cuando recuerda los suyos, los que ha vivido en primera persona. «A mi hijo le detectaron con 11 años una úlcera sangrante de duodeno, y lo llevamos al Materno. Estuvo durante un mes, pendiente que lo fueran a operar. El día antes de operarlo le hicieron las pruebas para ver cómo estaban las úlceras y habían desaparecido.... hasta hoy», recuerda. Asimismo, atribuye al Cautivo que su mujer, Mariola Flores Romero, haya podido superar un cáncer de esófago que le detectaron la pasada Semana Santa.
«Casos como estos hay… incontables. Personas que han venido justo el día antes de operarlas de corazón, o porque tengo un cáncer y sé que me voy a morir... », confiesa con la misma emoción. Pero José Luis ha sido y sigue siendo muy feliz al lado del Señor de Málaga. Empezó a vestirlo tan joven porque su antecesor, José María Marzo Vidaurreta, teniente hermano mayor de la cofradía, se encontraba mal de salud. A la iniciativa de Palomo se deben aquellos primeros besapiés improvisados a la imagen cuando llegaba al 'tinglao' tras el traslado en la misma mañana del Lunes Santo. «Recuerdo que lo poníamos sobre una mesa con una tela como buenamente podíamos, pero aquello tuvo que suprimirse porque se formaban largas colas y casi no nos daba tiempo de colocarlo en el trono para la procesión de la tarde», rememora.
Este veterano cofrade cree que el Cautivo ha hecho dos milagros para él mismo. Uno fue la decisión del Obispado de que la imagen, tallada inicialmente para ser mostrada sin túnica, fuera vestida. Tras una primera túnica de lanilla y tres de crespón, confeccionadas entre 1939 y 1948 por Ana Carrasco Castilla, la suegra de José Luis, Josefa Romero Mora, fue la que le hizo en el año 1962 la primera túnica de piel de ángel, material que le recomendó el comerciante de tejidos Piédrola y que, desde entonces, no ha dejado de utilizarse para vestir al Cautivo.
«Mi suegra hizo los dos vestidos más importantes de mi vida: la primera túnica de piel de ángel del Cautivo y el vestido de novia de mi mujer», apunta Palomo. A su juicio, el otro milagro del Señor para sí mismo fue la lluvia que cayó en la procesión del año 1979 y que dañó considerablemente el patrimonio de la cofradía. «Aquello nos sirvió para ver que la imagen no estaba bien, y desde entonces se le han hecho varias restauraciones hasta la última de Juan Manuel Miñarro que es la definitiva. Hoy podemos decir que tenemos imagen para cien años más, sin tenerla que tocar», asegura.
«Cuando visto al Cautivo, no puedo rezarle, le hablo como si fuera mi padre, mi Dios, que en definitiva es lo que es. Eso sí, le rezo todos los días. Estoy seguro de que él me está escuchando e interiormente siento cómo me está contestando», afirma José Luis Palomo, que lleva meses preparando su sucesión. Así, está elaborando un inventario con todas las túnicas que tiene el Cristo en uso: ocho para la capilla y cultos, ocho para la procesión (de cola más larga) y dos para el traslado. «Hay dos para el traslado porque siempre que lo vamos a cambiar se sacan dos túnicas, una que es la que se le pone y una segunda para tenerla a mano por si la primera se mancha o se rompe por alguna circunstancia», desvela.
En una agenda tiene anotadas las medidas de todas, un inventario exhaustivo del ajuar del Cautivo al que coloca el cíngulo y el escapulario con una depurada técnica perfeccionada con el paso de tantas décadas. A base de presillas y alfileres, José Luis hace que el Señor se presente igual de radiante cada Lunes Santo. En su memoria está Emilio Bautista Camacho, ya fallecido, que fue el sastre del Cautivo desde 1970 hasta 1994, y el modista Paco Ruiz, que lo relevó hasta 2022, cuando confeccionó una túnica regalada por Palomo, que es la que el Cristo sacará a la calle este Lunes Santo de su despedida. Asimismo, Jessica Morales Pérez cosió la túnica que iba a estrenar la pasada Semana Santa, cuando la meteorología impidió la salida de la procesión. Se trata de una donación de la banda de cornetas y tambores de la cofradía.
José Luis Palomo se jubila como vestidor del Cautivo pero su legado sigue vivo y perdurará siempre en la memoria de la Málaga cofrade que vio cómo en su etapa como hermano mayor se alcanzó el logro de la coronación canónica, impulsado especialmente por quien le sucedió años más tarde, el periodista Ignacio Castillo. Con la misma ilusión y devoción de aquel muchacho de 17 años, este Sábado de Pasión, Palomo volverá a 'coser' a alfileres en el corcho del trono la larga cola de la túnica del Cautivo que la brisa remueve cada Lunes Santo, como una bandera blanca que lo ha cobijado y siempre lo va a proteger.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.