Como miles de malagueños, los vecinos del barrio de la Trinidad tienen este Lunes Santo la mente puesta en Jesús Cautivo, el Señor de Málaga. El vacío impuesto por la pandemia del coronavirus se hace más notorio aún en unas calles que esta tarde tenían que ser un ir y venir de nazarenos, hombres de trono, devotos y promesas para seguir la estela de su túnica blanca.
Publicidad
Algunos han querido colocar signos para, de algún modo, hacer presente su devoción al Cautivo en las calles. Así, en algunas ventanas se han dispuesto cuadros con su imagen y con la de la Virgen de la Trinidad, y hay quien ha expuesto también tronos en miniatura para recordar una procesión que se espera con especial fervor para el año que viene, o cuando el Señor quiera.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.