Los sones de 'El novio de la muerte' volvieron a escucharse en las calles de Málaga en procesión tras dos años sin que pudieran oírse por culpa de la pandemia. Una representación de La Legión acompañó ayer al Cristo de la Buena Muerte. Al ser un cortejo extraordinario, la imagen no llevó corona de espinas. A la salida del Crucificado, la banda de cornetas y tambores de La Legión y la banda de música Nuestra Señora de la Soledad interpretaron 'El novio de la muerte', como también en varios puntos del recorrido y en el encierro. El trono, que lució un novedoso exorno floral de rosas rojas, fue escoltado por una escuadra de gastadores de la Bandera de Zapadores de La Legión.
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Tras el rezo de unas oraciones, el hermano mayor de Mena, Antonio de la Morena, dirigió unas palabras a los hombres de trono y les pidió una plegaria por las personas fallecidas a causa de la pandemia del coronavirus. «Que la mascarilla no impida ver vuestra sonrisa. Disfrutad bajo los varales, porque vais llevando al Cristo de Málaga», dijo De la Morena.
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