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andrés camino
Lunes, 11 de abril 2022, 01:19
Un grupo de alumnos del colegio de San Agustín, de los padres agustinos, decidió fundar en 1944 una cofradía penitencial con objeto de venerar a los titulares y procesionarlos en Semana Santa. Para ello, escogieron una antigua hermandad, la del Santo Cristo Coronado de Espinas y Nuestra Señora de la Esperanza, que había existido en el siglo XVIII, según el presbítero Cecilio García de la Leña, en una capilla del hospital de Santa Ana. Al título original de la Virgen, añadieron la advocación 'Gracia', por ser eminentemente de corte agustiniano.
Redactaron unos estatutos por los cuales regirse pero estos fueron rechazados por el obispo Balbino SantosOlivera. Nuevamente, los presentaron tras ser reformados, contando, en esta ocasión, con la aprobación eclesiástica. De este modo, la primera junta de gobierno quedó constituida el 5 de abril de 1945, saliendo elegido hermano mayor Luis Cárceles Sánchez.
La hermandad intentó sin éxito obtener como titular a un Ecce Homo, obra de Pedro de Mena y Medrano, que se hallaba en la abadía de Santa Ana, de laOrden del Cister.
Ante el desencanto, se decidió encargar la imagen al escultor malagueño Pedro Moreira López, quien reprodujo la escena evangé lica de la coronación de espinas. El Santo Cristo Coronado, sentado sobre una columna y con un cetro de caña entre sus manos atadas, se bendijo el 7 de abril de 1946 en la iglesia de San Agustín, sede en la que se había establecido la naciente hermandad.
En la Semana Santa de ese año, se produjo la primera salida procesional en la tardenoche del Lunes Santo. El trono fue portado por setenta estudiantes que eran hermanos, con trajes negros y precedidos por más de un centenar de penitentes, cuyo equipo estaba formado por una túnica de tela roja, con dos metros de tela recogida, cinturón de esparto y capirote blanco. Asimismo, hubo una representación simbólica de la sección de la Virgen, con la participación de tres nazarenos con las mismas características pero con el capirote de color verde.
El Señor Coronado de Espinas se procesionó en un trono realizado por José Rivas, según diseño de Agustín Laborde, el tallado correspondió a Antonio Fernández, la carpintería a Francisco Bruño y el dorado a Juan R. Flores, resultando una obra de estilo neogótico. En esta misma salida se hizo estación en la plaza delObispo para agradecer al prelado SantosOlivera que hubiese permitido la creación de la cofradía y la aprobación de los estatutos. Desde el balcón del palacio episcopal, la primera autoridad eclesiástica impartió la bendición a todos los hermanos. A partir de ese momento –a excepción de 1947 que no llegó a efectuarla y los años en que la procesión se suspendió a causa de la lluvia–, se ha ido convirtiendo en un acto emblemático de la corporación.
Una fecha de triste recuerdo fue la del 19 de noviembre de 1946, cuando la comunidad agustiniana decidió desvincularse de la cofradía. Esta circunstancia provocó el abandono de este enclave y se buscó acomodo en la perchelera parroquia de Nuestra Se ñora del Carmen, situándose el sagrado titular en el primer altar de la nave derecha.
En la Semana Santa de 1947, efectuó la salida el Domingo de Ramos. El cambio de día se debía a la recomendación de la Agrupación de Cofradías que veía en el Lunes Santo una jornada en la que efectuaban el recorrido oficial muchas hermandades.Otra novedad sería la presencia en el cortejo de Nuestra Señora de Gracia y Esperanza, imagen de gloria que aún se venera en la parroquia de los Santos Mártires.
Al año siguiente, la cofradía estableció definitivamente su sede canónica en la iglesia del Santo Cristo de la Salud, sita en la calle Compañía. La actual imagen de la Virgen de Gracia y Esperanza, adquirida en 1948 en el madrileñoTaller Caderot, se procesionó por primera vez el Lunes Santo de ese año. Bajo el gobierno de Manuel Atencia García, la efigie del Santo Cristo Coronado estrenó en 1952 un nuevo trono en madera dorada, de estilo neobarroco, diseñado y realizado por Cristóbal Velasco Cobos.
Los CuerposTécnicos y Administrativos de Aduanas fueron nombrados en 1957 hermanos mayores honorarios y ellos mismos costearon el manto de procesión, bordado en oro sobre terciopelo verde, que las Madres Adoratrices de Málaga terminaron de confeccionar en 1963, según boceto de Juan Bautista Casielles del Nido.
La Universidad de Málaga también se vinculó, siendo nombrada hermana mayor honoraria y cada año, en la presidencia de la procesión, participan el/la rector/a y miembros de la junta de gobierno.
En 1969, y siendo hermano mayor José Atencia García, se encomendó a Casielles el diseño de un trono para la sagrada titular, realizado en metal y plata cincelada por los sevillanos talleres de Villarreal en 1971.
La Virgen de Gracia y Esperanza estrenó nuevo trono en la Semana Santa de esa fecha y, en 1981, los hermanos de la cofradía se hicieron cargo de portar las andas procesionales. El cartel de la Semana Santa de 2006, obra de Antonio Montiel, tuvo como motivo central a un niño vestido de nazareno que apoyaba su mano derecha sobre la imagen del Santo Cristo Coronado de Espinas.
El 19 de junio del año 2000 se inauguró la casa hermandad, ubicada en la calle Alcazabilla, frente al complejo monumental de la Alcazaba. Al acto asistieron las autoridades civiles y hermanos mayores honorarios. A partir de ese momento, la hermandad dejó de salir del 'tinglao' que se instalaba en la calle Rodríguez Rubí, un callejón sin salida de la plaza de la Constitución, para iniciar el cortejo procesional desde el interior de su nueva sede administrativa.
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