Calor y devoción en el traslado de la Virgen de la Paz al santuario de la Patrona de Málaga

El motivo del regreso temporal de la hermandad a su antigua morada obedecía, por tanto, a la conmemoración de su centenario fundacional, que ya está llegando a su recta final. Y para festejar este acontecimiento, los cofrades de la Cena han querido reescribir su historia, acercando a su Virgen a su antigua iglesia y, en concreto, al espacio que ocupó su primitiva capilla, en el bajocoro del templo, donde hoy día se rinde culto a la Virgen de la Caridad y parte del exterior del atrio, y donde ha quedado expuesta la Dolorosa de la Paz en devoto besamanos hasta el jueves, tras su entrada en el santuario.

Hasta alcanzar este emblemático rincón de Málaga, centro de peregrinación de malagueños y foráneos durante todo el año, al estar dedicado al culto de la Patrona de la diócesis y lugar donde el rey Fernando el Católico tenía su campamento durante el asedio y toma de la ciudad en 1487, transcurrieron cuatro horas, tiempo empleado por la comitiva para recorrer los casi tres kilómetros que distan desde la parroquia de Santo Domingo, sede actual de la cofradía, hasta la basílica de la Victoria.

Aunque se trataba de un traslado, pero con tintes procesionales, ya que la procesión gloriosa se celebrará, en realidad, el próximo sábado 13 de julio, a partir de las 19 horas, la corporación, como de costumbre, mostró en la calle una cuidada puesta en escena.

Eran las nueve en punto de la mañana cuando se abrieron las puertas de Santo Domingo y sonaba la marcha 'Triunfal', mientras comenzaba a andar el cortejo, formado por la cruz alzada con dos ciriales, hermanos con cirios blancos, el guion y la mesa de gobierno, presidida por el hermano mayor, Rafael López Taza, y el párroco del templo dominico y director espiritual de la cofradía, Antonio Collado, quien hizo todo el recorrido, además del cuerpo de acólitos, que antecedía al trono. La Dolorosa vio la luz mañanera a las 9.05 horas. En ese momento, la banda de música Virgen del Rocío, que se estrenaba con la Hermandad de la Cena, interpretaba 'Virgen de la Paz', de Narciso Pérez Espinosa, con la plaza Fray Alonso de Santo Tomás con mucho público, pese al horario. La imagen iba radiante, como el día, vestida de blanco, con saya, manto y toca de sobremanto con bordados antiguos, y luciendo ráfaga sobredorada, de Orfebrería Montenegro. Su vestidor, Javier Nieto, le dispuso un rostrillo confeccionado con doble tejido. Así, llevaba una capa de tisú de oro antiguo combinado con un encaje de Bruselas. Además, la efigie exhibía varias joyas en su pecho, destacando, sobre todo, un camafeo antiguo con el Cristo de la Cena ejecutado en marfil, en claro guiño a la imagen cristológica que fue con la que se fundó la hermandad, y en su mano, una rosa de oro y nácar, una vara de olivo y, de estreno, un rosario en filigrana dorada, regalado por sus camareras.

La Virgen de la Paz avanzaba por el pasillo de Santo Domingo, donde la recibieron los hermanos de los Dolores del Puente ante su capilla callejera, que se encontraba abierta, y, en los metros finales del pasillo, la Dolorosa sufrió un pequeño percance, al impactar la cruz de la ráfaga con la pérgola, si bien, felizmente, todo quedó en un susto, aunque la pieza que recibió el golpe quedó ligeramente vencida hacia atrás. Minutos más tarde, la efigie abandonaba El Perchel, cruzando el Puente de la Aurora. En este punto sonaron dos marchas emblemáticas de Perfecto Artola ofrecidas a dos Dolorosas percheleras coronadas, 'Coronación de los Dolores', dedicada a la titular de la Archicofradía de la Expiración, y el 'Himno de Coronación de la Esperanza'.

El calor iba 'in crescendo'. Pero también la presencia de público que, a medida de que iba avanzando la mañana, aumentaba en cantidad y en expectación. El séquito discurrió unos metros por la avenida de La Rosaleda para girar hacia la estrecha calle Postigo de Arance y desembocar en Carretería, donde, a mediación de esta vía, aguardaba el bordador malagueño Juan Rosén, toda una institución en la Semana Santa de Málaga, quien entregó al hermano mayor de la Cena un cuadro con una fotografía de la antigua Virgen de la Paz que se veneraba en el santuario de la Victoria.

El cortejo, una vez recorrida la calle Carretería, varió el itinerario previsto por indicación municipal. Así, en lugar de subir Cárcer, vía elegida de inicio, o Dos Aceras, la segunda alternativa, marchó finalmente por Casapalma y Peña para luego bajar por Frailes, donde se encontraban las representaciones de las cofradías de los Gitanos y la Sentencia, y adentrarse en el barrio de la Victoria por el pasaje del Escultor Pedro Pérez Hidalgo, Cobertizo del Conde y Lagunillas. Ambas modificaciones de última hora se debieron a que la reparación del pavimento y otras actuaciones que se están acometiendo en la calle Madre de Dios, que también atañe a un pequeño tramo de Cárcer, no han concluido, pese a que las previsiones apuntaban a que estos trabajos estarían finalizados para esta fecha.

Con el termómetro en aumento y cada vez más público, la Virgen de la Paz hizo la doble curva de entrada a Lagunillas, ya en el barrio de la Victoria, con 'Alma de la Trinidad', de Eloy García, y 'Coronación de la Macarena', de Pedro Braña. Eran las 11.30 horas. La imagen figuraba en el antiguo trono de madera tallada de la primera versión de la Dolorosa, ejecutado en 1940 por el escultor, tallista y pintor Francisco Palma Burgos en su taller de la victoriana calle Cobertizo del Conde, por donde pasó la comitiva minutos antes, conjunto lignario hoy felizmente recuperado para andas de traslado con la intervención del tallista malagueño Manuel Toledano, después de permanecer durante 61 años en Ceuta y servir de paso procesional de Jesús Cautivo y Rescatado (1949-1990) y de la Pollinica (1991-2004). El trono, dirigido por el hermano mayor de la Cofradía del Rocío, Javier Martín, e iluminado con cuatro pequeños arbotantes con tres brazos, llevaba un exquisito exorno en el que predominaba el color blanco, con rosas, lisianthus, minigerberas, rosas de pitiminí, alelhíes y amaranthus, además de lentiscos dorados, helechos y, curiosamente, palomitas y mariposas. Y la efigie, alzada sobre la peana plateada de la carroza del Corpus del templo de los Mártires.

A las 12.05 horas llegaba el frente de procesión a la parroquia de San Lázaro y cinco minutos más tarde lo hacía, de forma triunfal, la Virgen de la Paz con 'Ros Coeli Regina Mundi', de Zambrana, composición dedicada a la Novia de Málaga. Precisamente, los cofrades del Nazareno de los Pasos y la Virgen del Rocío, guion incluido, entregaron un ramo de flores a la titular de la Cena, mientras repicaban las campanas de San Lázaro.

El sol apretaba de lo lindo en ese momento. Calor y devoción marcaban la ya tarde del primer domingo del mes de julio, pero el traslado estaba llegando a su fin. Tan solo faltaba subir el Compás de la Victoria, que lo hizo con otra marcha escrita para la devota Virgen blanca de San Lázaro, 'Rocío Coronada', de Molero, y alcanzar la iglesia de la Patrona, donde llegó, tras caminar por San Patricio y hacer los primeros metros de Fernando el Católico. Y con la archiconocida 'Málaga, a su Virgen de la Victoria', de Ginés Sánchez, subió, entre aplausos, la empinada rampa lateral de la plaza del santuario que desemboca en la puerta de San José del templo.

La titular mariana de la Hermandad de la Cena permanecerá en veneración y devoto besamanos hasta el próximo jueves 11 de julio, día en el que se oficiará, a las 20 horas, de una misa conmemorativa. A su finalización, en torno a las 21 horas, se procederá al traslado de la Virgen de la Paz hasta la casa hermandad de la Cofradía del Rocío, de donde se pondrá en marcha la procesión triunfal el sábado 13 de julio, a las 19 horas, con la Dolorosa en su trono de Semana Santa y con el acompañamiento de la banda de música de la Paz, formación que pone los sones a la titular de la Sagrada Cena cada Jueves Santo.

En este caso, el recorrido de vuelva será el siguiente: Párroco Ruiz Furest, Puerto Parejo, Cristo de la Epidemia, Gordón, Fernando el Católico, San Patricio, Compás de la Victoria, plaza de la Victoria, Victoria, Alcazabilla, plaza de la Aduana, Císter, San Agustín, Duque de la Victoria, plaza del Siglo, Molina Lario, plaza del Obispo, Molina Lario, Strachan, Larios, plaza de la Constitución, Especerías, Cisneros, Fajardo y Compañía, con encierro en la casa hermandad (1.30 horas).