Pablo Atencia: «El recorrido oficial ha dado resultado esta Semana Santa; el público ha disfrutado»

Ahora es tiempo de balance y es lo que hace el presidente de la Agrupación de Cofradías, Pablo Atencia, quien también habla de su futuro y el de la institución.

-Con la Semana Santa finalizada, toca hacer balance. ¿Cuál es el suyo?

-Estoy muy satisfecho. El balance es bastante positivo desde el punto de vista objetivo, con lo que hemos podido analizar con las cofradías. Las hermandades están satisfechas de sus desfiles procesionales. A nivel organizativo, todas las mejoras que habíamos planteados, teniendo en cuenta los déficits de la Semana Santa de 2022, se han acometido, tanto en movilidad de las personas como en cuestiones estéticas y de seguridad. Las mejorías han sido notorias. El nivel de satisfacción que hemos podido detectar ha sido importante. También la climatología ha acompañado y ha permitido la salida de todas las cofradías.

-¿Cómo ha visto la movilidad de las personas este año, que era uno de los déficit del actual recorrido oficial?

-Hemos tenido un grupo de personas que nos iba informando y la movilidad ha sido muy buena. Las medidas que se han adoptado, junto con el Ayuntamiento, Policía Local y Protección Civil, han funcionado. En este sentido, queremos agradecer, especialmente, el esfuerzo que ha realizado la Policía Local por mejorar la movilidad, junto con el propio personal de la Agrupación. Hemos tenido personas que han estado moviéndose constantemente por el Centro para informarnos, por si se producía algún tipo de incidencia, y apenas ha habido. Se ha demostrado que el recorrido oficial estaba diseñado con idea de que fuese más seguro y que tuviera una mayor movilidad. El público ya va conociendo los espacios por donde se puede desplazar. Ha habido un uso importantísimo de los accesos subterráneos del parking de la Acera de la Marina. En la Alameda Principal, que está absolutamente abierta, se ha congregado muchísimo público viendo las procesiones, porque la gente ha visto que allí se pueden ver las cofradías sin ser abonado, como en Atarazanas, en la zona norte de la Acera de la Marina y en Molina Lario. Y luego, en espacios como la calle Carretería y los habituales de salidas y encierros, hemos observado que la gente se ha movido bien. Hemos vuelto a la normalidad.

-Digamos que la gente se va acostumbrando al nuevo recorrido oficial.

-Efectivamente. Hemos percibido que, en el momento en que conoces el itinerario, puedes moverte con mucha más agilidad que con el anterior, porque así está organizado el recorrido. Hay puntos que, a lo mejor, tienes que esperar, pero hay alternativas. El movimiento de los pasillos ha sido, también, muy fluido. Es por ello que quiero dar las gracias al comportamiento del público, que ha sido excepcional en líneas generales.

-Imagino que, cuando sus obligaciones se lo han permitido, se ha movido, buscando cofradías. ¿Le ha gustado alguna calle en especial?

-Me ha gustado mucho Carretería. Había un público de calidad, muy respetuoso. Estoy convencido de que algunas cofradías, con el tiempo, volverán a esta calle. Dejaron de pasar por allí por algunas circunstancias, pero estoy seguro de que volverán.

-En cambio, Cisneros y Especería dejan mucho que desear. Este año algunos han hecho caja con las sillitas plegables.

-Bueno, son situaciones difíciles de gestionar. Esto depende de las administraciones y pueden crear conflictos. A lo mejor no se interviene por evitar conflictos. Existe un bando del Ayuntamiento en el que se prohíben las sillas. De todas formas, la movilidad también ha sido buena en esta zona.

-Si está satisfecho del resultado de esta Semana Santa, entiendo que esta última dispensa que ha solicitado al obispo para continuar un año más al frente de la Agrupación ha merecido la pena.

-Sí. Tenga en cuenta que el proyecto lo conocemos desde 2015 y sabíamos sus bonanzas, pero cuando se implementa cualquier proyecto, tiene su proceso. Hasta que se termina de implementar, se produce el método 'prueba y error'. El primer año tuvimos problemas, principalmente, con los abonados, que los llegamos a resolver. En 2022 vimos unos problemas y este año parece que todos esos problemas se han solventado. El público ha disfrutado y ya sabe moverse por el recorrido oficial. Además, me alegra mucho que la gente joven esté disfrutando como lo está haciendo, porque está comprobando todas las oportunidades que se abren, con nuevos espacios. Quizá hemos hablado en exceso del recorrido oficial. La gente se ha echado a la calle y se ha movido muy bien. El actual recorrido oficial es un proyecto que ha dado resultado, funciona, y con visión para tener una Semana Santa adelantada a su tiempo.

-¿Ha bajado este año el número de reclamaciones de los abonados?

-Sí. De 24.000 abonados, este año hemos tenido 50 reclamaciones. Fíjese el nivel de incidencia.

-¿Qué tipo de reclamaciones han llegado a la Agrupación?

-Alguna silla que se ha roto y también hubo algún problema en dos tribunas con los asientos traseros. Temas de ese tipo. Con el anterior recorrido eran cientos de reclamaciones.

¿Incidentes?

-Bueno, el más significativo el que se produjo en la zona de Atarazanas el pasado Jueves Santo. La buena planificación permitió que los sanitarios atendieran al abonado en tiempo récord, que eso antes era imposible. En la calle Especería, el Domingo de Ramos, ocurrió también un problema con una cornisa de un edificio cuando el viento más azotaba y pudieron entrar los Bomberos. El recorrido oficial está diseñado con luces largas para que estos problemas se puedan solucionar. Hemos diseñado algo que va a ser para plena satisfacción de todos.

-Hay abonados que se han quejado de que cada día tenían que acceder a su localidad por una zona distinta. ¿Sigue faltando coordinación con el personal de seguridad?

 -No. Han debido ser algunos casos puntuales. Es posible que, entre tantos miembros de seguridad, alguno no haya hecho su trabajo como es debido, pero, en general, ha funcionado muy bien.

-¿Y qué me puede decir los retrasos que se han producido casi todos los días de la Semana Santa? Algo está fallando en los horarios.

-Son desajustes normales que se producen en un nuevo recorrido. Poco a poco se irán corrigiendo. En el momento en que una cofradía se retrasa, implica a las demás. En general, casi todas las cofradías han cumplido con los horarios marcados, pero, claro, si una se retrasa, ya afecta a las que le siguen. Han sido casos puntuales.

-Bueno, puntuales, pero, en realidad, han existido retrasos casi todos los días.

-Sí, pero no es algo generalizado. Si una se retrasa, se retrasan las demás, pero analizando las situaciones, la inmensa mayoría ha cumplido su horario.

-También sigue habiendo voces que dicen que los tronos corren por el recorrido oficial. ¿Usted lo ve así?

-Recuerdo el anterior recorrido con los tronos corriendo. Hay que ir al ritmo que toque en cada momento para cumplir el horario. Con el actual recorrido, incluso, se ha dado un poco más de tiempo, viendo que hay más curvas. Ahora se ha ido adaptando a las necesidades que han ido planteando las cofradías. Yo este año no he percibido eso que me dice. No me consta que las cofradías necesiten más tiempo de paso. Si alguna ha corrido es porque tendría que recuperar tiempo. Esto es una cuestión matemática y está medido.

-¿La estética del recorrido oficial es la definitiva? Lo digo porque este año hemos visto la misma del año pasado, salvo la reducción de las viseras de las tribunas de la Acera de la Marina.

-Entiendo que cada año se pueden hacer mejoras, como ocurría con el anterior recorrido. El año pasado sí detectamos que había problemas de tráfico por la zona de la Acera de la Marina y, en colaboración con el Ayuntamiento, hemos retranqueado las tribunas y hemos bajado las viseras para que el impacto visual fuera menor, y creo que ha dado un buen resultado. Eran unas viseras de nueve metros y se han quedado en menos de tres y, estéticamente, se ha ganado mucho. La iluminación también se ha mejorado en esta zona. También hemos hecho un gran esfuerzo desde la Agrupación para que el recorrido oficial esté cerrado con su vallado. Ahora se ve bastante orden.

-¿Ha tenido oportunidad de hablar con el hermano de mayor de la Paloma acerca del retraso del Miércoles Santo? Hablamos de un retraso importante, por un problema en la mesa de trono de la Virgen que, por cierto, no transmitió al resto de cofradías ni a la propia Agrupación.

-Sí. Me han comentado que tuvieron un problema, pero es lo que he comentado antes. En el momento en que una cofradía se retrasa, afecta al resto.

-Imagino que la Expiración no estará especialmente contenta con este retraso.

-Claro que no. He podido hablar con ellos. He pedido a los hermanos mayores del Miércoles y Jueves Santo que, por favor, se reúnan de manera periódica para darle una solución. El resto de día ha ido buscando soluciones. El Domingo de Ramos y el Viernes Santo eran dos días muy difíciles de encajar, se han sentado y se han puesto de acuerdo. El Lunes Santo había un problema entre Estudiantes y Cautivo y se resolvió gracias al nuevo recorrido. Entiendo que el Miércoles y Jueves Santo se van a sentar para buscar la solución. La Agrupación no puede tomar la decisión. La Agrupación es un órgano colegiado. Por tanto, las decisiones las tienen que tomar las cofradías. Nosotros, lo único que podemos hacer, es ayudar a que se produzcan soluciones. Estamos al servicio de las cofradías.

-Insisto, ¿el hermano mayor de la Expiración le ha mostrado su descontento?

-Claro y yo lo entiendo, porque se le ha producido un perjuicio. Nosotros, lo único que podemos hacer es transmitirle nuestra solidaridad e intentar ayudar en todo lo que sea posible. Insisto en que es un tema que tienen que hablar las cofradías de cada día para que estas cosas no ocurran. Son cosas que se nos escapa como Agrupación. En Sevilla, por ejemplo, el Consejo de Hermandades sí puede tomar decisiones, pero aquí no. Aquí se tiene que consensuar.

-Entiendo que usted sabe que se han producido varias caídas provocadas por el líquido anticera. Incluso, el hermano mayor de las Fusionadas sufrió una caída antes de solicitar la venia. ¿Este líquido no se va a eliminar hasta que ocurra una desgracia?

-El coste económico para suprimir el líquido anticera es altísimo. Tenemos que convivir con este modelo, que es más económico. Sí hemos llegado a un acuerdo para que el pulverizado se haga con mayor distancia y que no se aplique a cada cofradías, sino cada dos.

-Pero otras capitales andaluzas no usan este líquido.

-No lo sé. Bueno, me han comentado que otras localidades sí se han interesado por este líquido y lo van a implantar.

-Los aforamientos han sido menores que el año pasado, ¿no?

-Bueno, la Policía dice que ellos no aforan, sino que limitan el acceso, que es el término correcto. El año pasado nosotros no tuvimos acceso a este tema, porque estábamos ocupados con el recorrido oficial y, desde el primer día, se está cumpliendo la normativa y está todo regulado, con mayor o menor eficacia en los pasillos, regulado por el personal de la Agrupación y la Policía, que la verdad es que se ha mejorado. En cambio, para las zonas de aproximación no teníamos acceso. Este año sí hemos tenido. Hemos trabajado conjuntamente y hemos hecho aportaciones que, ahí están los resultados. Se ha permitido este año que el público esté más cerca de las imágenes, que haya más movilidad en los pasillos, que no fuese necesario limitar el acceso... El Ayuntamiento, Policía Local y Nacional se han volcado. Había 80 cámaras de seguridad y un dron de seguridad para un control absoluto. Cada año hay mejoras y en este hemos avanzado mucho.

-¿Tiene este recorrido oficial más margen de mejora o ya está todo expuesto?

-Siempre hay posibilidades de mejorar. Nosotros estamos abiertos. Próximamente, haremos nuestro balance y veremos qué queda por hacer. Sí es verdad que está ya muy trabajado. El proyecto, cuando se analiza con perspectiva, sobre todo, por profesionales y por gente de fuera que lo mira de otra manera, reconocen que es un proyecto muy completo y trabajado por buenos profesionales y que cuenta con el plácet de las administraciones. Si se analiza, el recorrido oficial de la Semana Santa de Málaga está mucho más ordenado que antes. Tenemos más puntos de acceso policial, puestos sanitarios, el transporte público, la movilidad de las personas, espacios abiertos... Es decir, desde el punto de vista técnico, es fantástico. Otro tema distinto son las cosas emocionales, pero la gente se va acostumbrando y adaptando al nuevo recorrido. Lógicamente, hay personas que no les gusta, pero esto no es una cuestión de gustos, sino que, por responsabilidad, hemos tenido que tomar unas medidas y, o suprimíamos 8.000 sillas o ampliábamos el recorrido. La 'L' anterior se sigue manteniendo. Se pasa por la Alameda, por Larios y por la plaza de la Constitución. Cuando se cambió el anterior recorrido es porque ese proyecto estaba agotado.

-Bueno, ahora es un círculo, no una 'L'.

-Pero antes estaba el pasillo de Santa Isabel que no era recorrido oficial, pero sí lo utilizaban muchas cofradías.

-¿Esta ha sido su última Semana Santa como presidente o todavía puede haber sorpresas de última hora?

-Los cofrades mantenemos la liturgia. Anunciaré lo que tenga que anunciar en el momento que considere oportuno. Hablaré con los hermanos mayores. No obstante, entiendo que hay otras personas que están interesadas en presentarse y, evidentemente, pueden ir planteándolo. Hasta ahora, todo el mundo ha actuado con mucha lealtad y lo tengo que agradecer. Estoy contentísimo con los hermanos mayores y delegados. Gracias a Dios, hay una armonía y un trabajo en equipo que da gusto.

-¿El recorrido oficial le ha quitado el sueño muchas noches?

-Sí. Cuando lo planteamos en su día, yo era plenamente consciente de las consecuencias que iba a tener, porque estábamos tocando emociones. Aunque desde el punto de vista técnico y organizativo, la propuesta era impecable, porque tenía el visto bueno de las administraciones y estaba respaldada por magníficos profesionales, el factor emocional es muy difícil de medir. Por tanto, éramos conscientes de que no sería fácil, por mucho que explicaras a 8.000 personas los motivos del cambio de ubicación de sus localidades. Pero es que si no los movíamos, se habrían perdido 8.000 sillas. Esto es un proyecto colectivo, no un capricho del presidente. Yo ni siquiera, como presidente, voté al cambio. Fue fruto de la responsabilidad y he sufrido por las personas a las que le hemos trastocado su Semana Santa, porque, insisto, estamos hablando de emociones. Hay quien estaba acostumbrado a ver las procesiones en un sitio y ahora las ven en otro. He sufrido, claro, pero pienso que las organizaciones tienen que ir por delante. La Semana Santa que disfrutamos es la que diseñaron nuestros antecesores. Nosotros, ahora, tenemos que diseñar la Semana Santa del futuro. Teníamos un modelo que ya no funcionaba y había que adaptarlo. Teníamos la opción de suprimir 8.000 sillas o ampliar el recorrido oficial. Si miramos la historia vemos que, cuando se implantó la Alameda, le gente decía que era el fin de la Semana Santa, porque esa zona era desangelada. Cuando hay cualquier cambio se generan problemas. Esto siempre ha pasado y pasará. Son cosas cíclicas que ocurren. Cuando transcurre el tiempo, las personas nos adaptamos. Seguramente, los más críticos ahora terminarán siendo los principales defensores en el futuro.

-¿Le ha generado enemistades el recorrido oficial?

-No, qué va. Todo lo contrario. He hecho amistades con personas que eran muy críticas. Cuando he tenido oportunidad de hablar con ellos para explicarles el proyecto y los motivos, hemos terminado siendo muy amigos. Este asunto ha generado una cercanía y un diálogo que ha terminado creándose una amistad. A la gente, cuando se le explican las cosas, terminan entendiéndolas. Pero, lo que decía antes: hablamos de cuestiones emocionales y es difícil.

-Dando por hecho que dejará el sillón de San Julián, salvo giro inesperado. ¿Se marcha tranquilo de la Agrupación?

-Sí. Nosotros pusimos en la mesa, en 2015, un proyecto que es el que eligieron las cofradías y es el que hemos desarrollado. Hemos actuado con responsabilidad en todo momento. Hemos sacado adelante todos los proyectos planteados. Una organización tiene que estar en la mejora continua, porque si se paraliza, al final termina decayendo.

-Aunque los estatutos marcan que las elecciones a la presidencia de la Agrupación se deben celebrar en el mes de octubre, ¿podrían adelantarse para que el nuevo presidente o presidenta comience a trabajar en septiembre, coincidiendo con la apertura del curso cofrade?

-Ahora mismo no nos lo hemos planteado. Los estatutos hablan de octubre. Fue un cambio que se hizo, porque antes coincidían las elecciones de la Agrupación con las de muchas cofradías y se renovaban las juntas de gobierno de las hermandades. Por eso se decidió distanciarlas en tiempo. Nosotros vamos a cumplir lo que dicen los estatutos. Las elecciones deben celebrarse en octubre.

-Todo apunta que su sucesor saldrá de la terna entre José Carlos Garín, su vicepresidente primero, y María del Carmen Ledesma, su vicepresidenta segunda. ¿Se declina por alguno?

-No, no. Mi papel institucional siempre estará al margen. Me tendré que sentar con las personas que decidan presentarse para establecer unas normas y poner en marcha el proceso para desarrollarlo de manera leal.

-Cuando se marche de la Agrupación, ¿a qué va a dedicar el tiempo libre?

-Estaré a disposición siempre de la Agrupación. Hay personas que opinan que hay que irse a la última fila, pero no estoy de acuerdo. Hay que estar al lado y acompañando, teniendo la visión de Estado; es decir, estar junto a los que asumen las nuevas responsabilidades, respetando sus decisiones, aconsejándoles cuando me pidan consejo y, sobre todo, no hay perjudicar al que esté. Hay que trabajar al lado con lealtad.

-¿Si el presidente o presidenta le ofreciera un cargo de responsabilidad lo aceptaría?

-No, no tiene sentido. Puedo colaborar mejor de otra manera. Siempre estaré a disposición de lo que me pidan.

-Por último, ¿le veremos en política?

-Tengo proyectos profesionales muy interesantes que me exigen mucha dedicación. Mi vocación de servicio público siempre la he desarrollado en el ámbito de las cofradías y en ONG vinculadas, sobre todo, a la Iglesia. La política es algo que es muy bonito, muy noble, pero pienso que la sociedad también se puede cambiar desde fuera de la política. Esto no quita que me lo pueda plantear transcurridos unos años y cuando la circunstancias de la vida lo permitan. Si hubiera tenido interés en estar en política, estaría. Ahora me voy a centrar en el ámbito profesional.

-Pero alguna vez le han tanteado para entrar en política, ¿verdad?

-Sí, pero las circunstancias nunca me han permitido que entre en política. Nunca he dicho que no, pero no podía decir que sí.