Antonio M. Romero
Domingo, 24 de enero 2016, 00:37
El próximo 29 de enero, viernes, los 2.306 hermanos de la Cofradía del Cautivo y la Trinidad con derecho a voto tienen la palabra para que la hermandad trinitaria recupere la normalidad interna tras un año intervenida por el Obispado a través del comisario episcopal Carlos Ismael Álvarez. Una decisión que Palacio adoptó tras los graves problemas internos vividos durante el convulso último periodo de Juan Partal como hermano mayor y el breve mandato de Juan Bautista.
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Los hermanos podrán votar de doce de la mañana a nueve de la noche en la casa hermandad y elegir entre las dos candidaturas que concurren a los comicios: la encabezada por Fernando Cabello y la de Ignacio Castillo. Con este proceso electoral el Cautivo busca hacer borrón y cuenta nueva.
- Fernando Cabello no es partidario de que el Cautivo presida el altar mayor y propone llevar el museo a la casa hermandad: «La cofradía está por encima de todos: hace falta mucha humildad»..
- Ignacio Castillo plantea una nueva casa hermandad en la plaza junto a la iglesia y llevar al Señor al altar mayor: «Queremos que San Pablo sea la basílica de Jesús Cautivo».
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