José María Jiménez: «Nos gustaría contar con un trono nuevo para la Virgen»

Abandera la ilusión de un equipo muy joven, que al mostrar su interés por regir los destinos de la Cofradía de Nueva Esperanza levantó ciertos recelos entre quienes piensan que la bisoñez está reñida con la eficacia en la toma de decisiones. Pero el afán por mejorar y la devoción a los titulares mueven a José María Jiménez a liderar unos cambios con nuevas ideas y proyectos.

¿Siempre ha tenido claro ser hermano mayor?

Siempre he tenido claro, no ser hermano mayor, pero sí trabajar por mi hermandad en la primera línea. Lo que no esperaba es serlo tan pronto. Tras el paso atrás de Francisco Benítez al frente de la cofradía, se dio la posibilidad de que el grupo joven decidiera coger las riendas de una hermandad que hoy en día tiene muchas cosas que ofrecer a la Málaga cofrade, pese al inconveniente de la lejanía de nuestra sede, pero con el apoyo de todo un barrio. Quizás no soy un hermano mayor conocido dentro de la Semana Santa, pero trabajamos desde la humildad en ir demostrando poco a poco que una hermandad joven puede hacer cosas importantes.

¿Qué ambiente se respira ahora en la corporación?

Si no me equivoco, creo que somos la primera o la segunda hermandad que creó un grupo joven en la Semana Santa de Málaga. De hecho, nuestro actual fiscal fue el creador del grupo joven. Nueva Esperanza siempre ha sido una hermandad capaz de modernizarse algo más que otras cofradías, quizás por el carácter joven de la propia corporación. Cuando entramos, hubo algún grupo receloso o expectante por si íbamos a ser capaces de llevar una hermandad durante 365 días al año. El ambiente es muy bueno y estamos demostrando que se puede hacer.

¿Cuáles serán las preferencias durante su mandato?

-Entre nuestras prioridades, se encuentra recuperar la conexión con los vecinos de nuestro barrio y con los comerciantes del mismo, así como organizar charlas de formación religiosa en la parroquia, impartidas por el director espiritual.

¿Qué otros proyectos hay pendientes de ejecutar?

Vamos bastante justos con la hipoteca de la casa hermandad y no podemos hacer muchas cosas. Intentaremos estrenar las pértigas y el cuerpo de acólitos el año que viene y estrenaremos algo más poco a poco. Queremos potenciar la participación de nazarenos e involucrarlos en la vida de la hermandad, así como concienciarlos para que hagan el recorrido hasta el final. Pero nos gustaría contar con un trono nuevo para la Virgen completo. Es decir, con su palio, manto, saya, corona... Un proyecto que anhela toda la hermandad, aunque será a largo plazo y con el consenso de todos los hermanos.

¿Han creado una vocalía de caridad?

Efectivamente. Así se coordina toda la obra social que hacemos con Cáritas Parroquial, recogida de juguetes... Y aunque hemos tenido reuniones con Corinto, ahora no podemos afrontar los ingresos que eso supone, pero en cuanto se pueda formaremos parte.

¿Hay consenso entre los hermanos con esa nueva modalidad de pulsos?

Sí, lo hay. Aunque al principio la gente fue más reacia, se ha consolidado como una de nuestras señas de identidad.

¿Contento con el cambio de banda tras la Virgen?

Muy contento. Aprovecho para agradecer a la banda de música de los Moraos de Almogía el trabajo tan extraordinario que han realizado tras el trono de la Virgen durante estos años, y que seguiremos consolidando con la banda de música Nuestra Madre de la Consolación, de Huelva.

Como responsable de la comisión de seguridad y orden público de la Agrupación, ¿qué medidas se van a llevar a cabo?

Estamos preparando un dossier, que pasaremos a todas las cofradías, para conocer los problemas que tienen cada una de las hermandades en esta materia en Semana Santa y hacérselos llegar de manera conjunta a la mesa de seguridad, que depende de la Subdelegación del Gobierno, para que se puedan atender estas situaciones.