Más allá de la gran fortaleza de Almodóvar del Río

Almodóvar del Río es una villa cordobesa que con su nombre y su fisionomía arquitectónica delata su pasado andalusí. La localidad tiene su principal legado histórico en su castillo, que se puede visitar en cualquier época del año, por dentro y por fuera. Esta fortaleza se construyó a mediados del siglo VIII para vigilar el Guadalquivir, que por aquella época era navegable -al menos por barcas-. Situada sobre una colina de unos doscientos metros de altura, fue una de las más importantes de Andalucía hasta la toma definitiva de la ciudad por las tropas de Castilla. A principios del pasado siglo fue remodelado por el que fue su dueño en aquella época, el conde de Torralva. Gracias a ello, hoy se encuentra en muy buen estado y ofrece visitas guiadas por actores que representan a personajes históricos, como el mayordomo del rey Pedro I o el propio conde de Torralvo. Pero, además de su castillo, Almodóvar también cuenta con más patrimonio histórico, como es el 'portus' romano, situado junto al Guadalquivir, la iglesia de la Inmaculada Concepción o la ermita del Rosario. A estas construcciones, hay que unir la casa solariega dieciochesca que es la sede del Ateneo Popular de Almodóvar del Río.

Parte del atractivo de esta villa también reside lejos de su casco urbano. Concretamente, en el embalse de la Breña, que no sólo es un paisaje hidrológico de primer nivel sino que también sirve para la práctica de distintas actividades relacionadas con la naturaleza. La gastronomía tradicional es hoy uno de los principales atractivos de esta villa cordobesa. Entre los platos más célebres, está la mazamorra, que muchos vinculan con la gastronomía romana. Con muchas similitudes con el ajoblanco, no suele llevar almendra, pero sí ajo, aceite de oliva, vinagre, agua y sal.

Otro plato que no se pueden obviar en cualquier paso por esta villa son las croquetas. Hoy todavía se conserva en la mítica Taberna de Almodóvar la receta centenaria que se encargó de difundir Ricardo Arribas. Junto a esta elaboración, también son típicos del pueblo el gazpacho de jeringuilla, el conejo en pepitoria y el guiso de cardos.