Peñón del Cuervo, una cala con historia más allá de El Palo

Las mencionadas barbacoas pueden suplir ese déficit de establecimientos de restauración, aunque no siempre es fácil encontrar hueco. Sobre todo en los fines de semana, ya sea de día o de noche. Hay quien se queja, sobre todo en pandemia, del bullicio y del ruido que contrasta con una playa que en una fotografía se antoja tranquila, casi idílica.

Desde casi cualquier punto de la cala, el protagonismo del paisaje recae en el propio Peñón del Cuervo, una impresionante roca que parece emerger del mar, aunque en realidad esté unido a la orilla por un istmo.

A diferencia de otras playas, el acceso a la cala del Peñón del Cuervo no es intuitivo. Requiere de GPS o de conocimiento previo de la zona. Algunos prefieren entrar desde la zona de Jarazmín para pasar justo después por las instalaciones que Emasa tiene cerca del mar. Otros directamente desde El Candado por una salida más directa desde la antigua N-340. Menos complejo resulta llegar hasta allí en bicicleta o a pie, ya que la playa cuenta con carriles anchos que forman parte de la Senda Litoral y de la Gran Senda de Málaga y, por tanto, es accesible sobre dos ruedas y andando desde El Palo y desde La Cala del Moral.

Esta playa resulta muy interesante desde el punto de vista d la flora y la fauna, con presencia de especies que se describen en algunos paneles cercanos, junto a un reloj de sol. También allí, junto al túnel que en su día sirvió para el ferrocarril, se recuerda la trágica 'Desbandá' de 1937. Por allí mismo pasaron miles de malagueños en su éxodo a un lugar seguro mientras eran bombardeados desde la costa por el bando franquista y desde el aire por los aviones alemanes e italianos, durante la Guerra Civil.

Algo más lejos de allí, en La Araña, aguardan una antigua torre vigía y un yacimiento arqueológico, el Complejo Humo, un enclave kárstico donde se han hallado valiosos restos prehistóricos.