CINE

Planes en casa: El réquiem de Scorsese por una generación

Contrató a siete de los mejores directores de fotografía del mundo para 'El último vals'

o. BELATEGUI

Jueves, 2 de abril 2020, 19:20

Martin Scorsese atravesaba un infierno personal en 1976, cuando afrontó el rodaje del mejor documental rock de todos los tiempos. Robbie Robertson, el carismático líder de The Band, le suministraba las drogas necesarias para sobrellevar un tren de vida salvaje, con fines de semana sin noches en Londres, París y Los Ángeles. El fracaso de 'New York, New York' y el naufragio de su matrimonio con Julia Cameron tampoco ayudaban. El director no perdió la oportunidad de filmar el adiós del grupo en el Bill Grahams Winterland de San Francisco el Día de Acción de Gracias, acompañado de estrellas invitadas: Eric Clapton, Neil Young, Neil Diamond, Van Morrison, Ringo Star, Ronnie Wood...

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Scorsese contrató a siete de los mejores directores de fotografía del mundo y añadió a las grabaciones del concierto entrevistas en el 'backstage' y un bellísimo epílogo en un plató. Prescinde de los socorridos planos del público y consigue que las canciones tengan tanto interés como las declaraciones de este grupo de supervivientes. «¿Y ahora qué?», le pregunta el autor de 'TaxiDriver' a Robertson. «La música nos llevará siempre», contesta evasivo el músico, que quería dejar la carretera y dedicarse al cine. La elección de las canciones en las películas de Scorsese, sin ir más lejos, fue uno de sus cometidos.

A años luz de la aséptica 'Shine a Light' protagonizada por los Rolling Stones, deslumbrante a nivel formal pero vacía de emoción, 'El último vals' es un melancólico y espeluznante réquiem por toda una generación. En 1983, The Band volvería a ponerse encima de los escenarios, ya sin Robbie Robertson. Pero esa es ya otra historia.

Disponible en: Filmin.

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