Unicaja: estamos a tiempo

El pasado jueves, se ha renovado el Patronato de la Fundación Unicaja, y su nueva composición ha devuelto la esperanza en el futuro, con aires nuevos apegados a la legalidad y a la identidad que debe presidir la entidad. A los pocos patronos 'medelistas' que quedan, les honraría un gesto de dignidad en forma de dimisión. Sin la acción y constancia de los que han/hemos mantenido una oposición digna (y muchas veces solitaria e incomprendida) contra los despropósitos de Medel y sus aliados, esto no se hubiera conseguido. Quiero destacar en especial el papel de algunos medios de comunicación valientes (no todos, sea dicho por respeto a la verdad), de los partidos políticos (alguno de ellos con titubeos, todo sea dicho), de los sindicatos, y de la minoría de patronos dignos, que en soledad y acosados, dieron la cara en el seno del patronato de la fundación. Y si me permiten, quiero mostrar, en especial, mi gratitud más sentida, a los casi 9.000 ciudadanos que con la adhesión a la plataforma que tuve el honor de promover ('Salvemos Unicaja'), han apoyado sus acciones y propuestas.

Pero no hay que cantar victoria aún: Unicaja Banco sigue en peligro. El Sr. Menéndez, el consejero delegado que ha subvertido los pactos de fusión con el apoyo de Medel y gran parte del Consejo de Administración (incluidos, de forma inadmisible, los 4 consejeros dominicales de la Fundación), sigue implantando su 'estilo' de gestión: sumiso con los clientes poderosos, y despiadado con los trabajadores del banco y con los clientes modestos. Es tarea urgente sacar a Medel de las fundaciones que aún preside, destituir a los actuales consejeros dominicales de la Fundación Unicaja y nombrar para el Consejo de Administración del banco a personas preparadas, con trayectorias impecables, y con la valentía necesaria para poner coto a la deriva suicida a la que Menéndez lleva a Unicaja.

En definitiva, la toma de las riendas de la entidad por dirigentes que garanticen la gestión profesional, la vinculación territorial (red de sucursales, empleo, sede social en Málaga) y la vertiente social para los más desfavorecidos propia de un banco derivado de una caja de ahorros. Estamos a tiempo.