La australiana Rachael Gunn, durante su actuación en breaking en los Juegos de París. AP
Opinión

Un verano glorioso

En diagonal ·

La risión mundial que provocó la australiana Gunn con su actuación olímpica en breaking no puede compararse con todo lo que hay alrededor de Puigdemont

Lunes, 12 de agosto 2024, 00:29

Se ha hecho famosa Rachael Gunn, que tiene un doctorado en estudios culturales (sea eso lo que sea). Participó por Australia en breaking, obtuvo cero puntos, fue la risión mundial y quizá su máximo mérito sea que la especialidad no vuelva a verse en unos ... Juegos. Por lo visto, se toma muy en serio el aspecto antropológico del breaking (y supongo que el del 'crusaíto'). Entre sus movimientos está el canguro. Como en el de la rana, pero sin girar y sin toro. Y luego también hizo la croqueta.

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Son momentos épicos de los Juegos, pero no pueden compararse con todo lo que hay alrededor de Puigdemont. Lo del tipo fotografiado saliendo de una casa cuando pasaba el 'molt honorable' (el muchacho es practicante de sadomasoquismo alternativo orientado a «otras feminidades»). O que huyera en un coche conducido por una tenista paralímpica. Ya pueden sacarse lo que rima con olla para tirar la barra de la pértiga. No llegan. Verano glorioso.

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