Una lección para los gurús

Su mayor ridículo lo han cosechado en la capital de la provincia, donde esos 'gurús' nos bombardearon contra el modelo de ciudad «retrógrado, erróneo y acabado» (sic) de Paco de la Torre: lo que proclamaban como «hastío de los vecinos» y calificaban de «clamor popular» (sic) contra la gestión del alcalde era algo que sólo existía en sus mentes, algunas muy calenturientas. ¿Dónde están los vecinos del centro que estaban hartos del 'modelo De la Torre'? En el centro el alcalde, literalmente, ha barrido. ¿Dónde están los que decían que en los barrios el alcalde iba a ser fulminado? Su victoria en algunas zonas ha sido para estudiarla... Por favor, que se tomen un descansito. Las redes sociales se han erigido en representantes de una verdad absoluta que es falsa, que por ahora no existe. Ya lo dijo Umberto Eco cuando, aparte de otros términos mucho más duros y contundentes sobre ellas, señaló que sólo eran útiles para el entretenimiento de los que tienen demasiado tiempo ocioso y de quienes se creen el ombligo del mundo. Sea como fuere, pocas veces ha habido un mayor ridículo que el de los 'gurús' tuiteros que vaticinaban el descalabro en Málaga del PP en general y de Paco de la Torre en particular.

El PP de Málaga, en un mes, ha renacido de las cenizas del descalabro nacional del 28-A, y lo ha hecho con mejores resultados que hace cuatro años, recuperando ciudades muy importantes y sobre todo con unos resultados en la capital espectaculares de la mano de un De la Torre al que casi hasta le votó Carmena...

Málaga y Andalucía, tras este 26-M, salen reforzados y se convierten en obligada referencia para un PP que a nivel nacional no ha tenido unos buenos resultados. A Pablo Casado no le queda más remedio que mirar al sur.