Lo importante

Todo eso queda en un segundo lugar si lo ponemos al lado de esa cama donde el traje de nazareno planchado a la perfección espera al niño, al joven o al mayor, mientras que de la silla cuelgan el cíngulo y en su base reposan el capirote y los guantes. Es la estampa que siempre recordaba en sus inigualables 'Láminas' en 'Pasión del Sur' el llorado Antonio Garrido Moraga. Es la celestial ceremonia que revive la tradición religiosa, cultural, histórica, social y antropológica de un pueblo que comenzó a tejer lo que llega mañana hace más de seis siglos... 600 años dicen mucho y sobre todo sirven para haber entrenado bien para que cada Semana Santa sepa a gloria. Una vez que termine, una vez que los tronos estén en las casas de hermandad o en las iglesias, una vez que Jesús y María retornen a sus altares, entonces, si quieren, todos, comencemos de nuevo a debatir sobre lo que cada uno quiera y desee, y por los medios que elija, incluidas las redes sociales que, con perdón, tanto daño hacen.

Ese Lunes de Pascua, con la felicidad de haber hecho todos una gran Semana Santa, saquemos lo que tengamos que sacar para mejorarla, pero mientras tanto no olvidemos que lo importante es lo que sobre las 10 horas de mañana pasará en calle Parras, cuando las primeras campanas anuncien que Jesús y María se pasean ya por Málaga...