Borrar

La desesperación política

Domingo, 11 de junio 2023, 02:00

Avanzan las fechas cálido-electoreras, esto es un no parar. La repentina llegada de elecciones generales ha disparado los pactos, las rupturas y hasta los vetos. Dicen que en la proximidad de unos comicios hay que poner un especial cuidado, no ya para acertar -que ... también-, sino para no meter la pata. La fallida visita de una delegación alemana del Bundestag para inspeccionar algunos de los modos de producción patrios en Huelva -fresa- y también en Almería no ha sido el mejor hecho de campaña. El aliento -o puede que más que eso- de Sánchez a esta iniciativa, de la ministra-vicepresidenta Ribera y, dicen, del ministro Garzón, no parece ni haber sido buena idea ni haber dado ningún punto positivo a la coalición todavía gubernamental. Ni que decir tiene que esta intromisión de un parlamento de la UE en la gobernanza interna de otro país miembro es perfectamente descriptible. España, como el resto de países de la Unión, está sometida a los controles directivos de las normas y los comisarios al efecto. Si de delegaciones parlamentarias se trata, hay que recordar que hay un Parlamento Europeo para ello. Otra cosa es una invitación puntual de las instituciones de un estado a sus homónimas de otro, que no parece el caso. Pero, más allá de la ausencia de precedentes a sensu contrario, la presunta posición de Sánchez, ponerse a favor de nuestros contrarios en una guerra comercial, es un auténtico escándalo. Por cierto, la ilegalidad parcial o total, adjudicada por Ribera al proceso de cosecha y producción de la fresa de Huelva, ha sido rechazada tajantemente por los agricultores compelidos. También ciertas cadenas extranjeras de supermercados, que amenazaron con el boicot, estos sí, invitados por los interesados a visitar el territorio y los cultivos, rectificaron de inmediato afirmando haber comprobado la legalidad ejemplar de los frutos rojos. Representar a España -hay que recordarlo- pasa por velar por los intereses de los españoles, por sus iniciativas, productos, empresas... En fin, lo más elemental.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariosur La desesperación política