Deja de joder

Otra vez han pillado alijo de marihuana en la Axarquía. Parece un niño travieso lleva tiempo tocando las narices. Se han movilizado doscientos guardias civiles para detener a los gestores de una parcela de 10.000 paradisiacas hectáreas. La Axarquía es un paraíso. Mira el mar desde el mero Maro, por ejemplo. Sobre sus formidables acantilados han proyectado un interminable campo de golf y residencias, el paisaje va a cambiar. Es sorprendente el exagerado valor catastral de 10.000 hectáreas cultivadas de plantas de cáñamo o de una extensión similar donde pretenden hacer 18 hoyos con sus 18 banderitas. Habrá que cuidar además de que si disfruta una pareja del paraje abajo en la playa (cuando calienta el sol, que es siempre) no sufra demasiados pelotazos aunque no hay que preocuparse mucho por eso, el golf tiene sus trayectos y recorridos, que aquí son largos. En Málaga tenemos a Miguel Ángel Jiménez y en el Cantábrico vasco ha surgido un joven que va para número uno del mundo; sin embargo, nosotros tenemos ahora el problema con el niñato de Almayate donde han descubierto no un puerto de yates sino de narcolanchas. El negocio de Almayate es milagroso y los narcos parecían caminar sobre las aguas, pero a buenas horas mangas verdes.

También habrá que vigilar que los turistas que acudan a Maro no se acerquen al precipicio, porque ahí ya estamos nosotros. No es un buen año para el turismo, así que por lo menos que permanezcan los que están viniendo y un mal paso en Maro es un paso malísimo. Y no nos olvidemos de que podrían caer sobre la pareja del paraje, abajo en la playa, cuando calienta el sol. Sobre todo ahora que los llamados países frugales, donde hay gente altísima, nos tratan como a esos locos bajitos que no dejan de joder con la pelota, como cantaba Serrat. «Dejar de joder». Se lee igual del derecho que del revés (no es cierto, pero ¿a que lo parece?). Serrat al revés es casi abrid y no se le puede poner puertas al campo, que si no interviene la Guardia Civil. Tampoco nos interesa demasiado un modelo económico basado en el narcoturismo. Dicen que la 'maría' huele mejor que un monte de algarrobos, pero con las algarrobas se prepara chocolate y me refiero chocolate chocolate no al primo de la 'maría'. Al final, de toda esta historia lo importante es que podamos alejarnos del precipicio y una buena manera de hacerlo es sin amontonarnos usando nuestras mascarillas y disfrutando de la playa, un lujo a nuestro alcance. Los narcos detenidos pasarán el verano entre las cárceles de Alhaurín y Archidona, dos poblaciones que tampoco están nada mal.