Debería preocuparse

Desde 2018, la Unión Europea ya no considera a Andorra un paraíso fiscal, pero sin lugar a dudas es el Edén de los amigos de pagar pocos impuesto. Que un español resida en Andorra no implica ilegalidad alguna, pero para acogerse a su tributación debe acreditar que no pasa más de 183 días en España durante el año. Y esto, por razones obvias, se vigila con legítimo celo por Hacienda, y teniendo en cuenta las enormes cantidades que ingresa el insolidario youtuber, si lo pescan en residencia ficticia le puede costar caro ya que hablaríamos de delito fiscal. Además, residir en Andorra no extingue cualquier relación con la AEAT, ya que si una parte de los ingresos los pagan empresas españolas (o empresas radicadas en España), El Rubius y sus colegas de andanzas andorranas tienen que tributar a la Hacienda española como no residentes (eso sí, con el tipo máximo del 24% y con el descuento de las autoridades tributarias de Andorra). Pero creo que el principal motivo de preocupación de El Rubius es el futuro de su lucrativo negocio. Estoy convencido que, más allá de gustos personales, la inmensa mayoría de los treinta y nueve millones de suscriptores que tiene este caballero son personas inteligentes y honestas, y se pueden preguntar si vale la pena financiar con su adhesión a alguien tan poco comprometido en el sostenimiento de los gastos para su educación, la sanidad y los servicios esenciales en cualquier sociedad civilizada. Lo dicho, debería preocuparse.