Regalos defensivos

Hay en el fútbol una máxima más vieja que el propio 'deporte rey' que dice que el que perdona acaba perdiendo. Eso le sucedió al Málaga ayer. El equipo blanquiazul perdonó en dos ocasiones seguidas superada la media hora, y el Sevilla, no. La diferencia estriba en tener alguna referencia arriba o no tenerla. El Málaga no la tuvo en casi todo el partido; el Sevilla, sí. Después entró Javi Guerra, un ariete con visión de gol, pero que necesita rodaje en esta Liga tan competitiva. Ni siquiera la desmesurada cantidad de faltas cometidas frente a otros partidos (ayer, 18) le sirvió al equipo de La Rosaleda para frenar a un rival superior.

Acusó en exceso el equipo entrenado por Javi Gracia el gol local y apenas levantó cabeza desde ese minuto 36. Dos antes, Duda se encontró con un balón regalado en la frontal y lo mandó fuera, cuando no parecía complicado enviarlo entre los tres palos. El portugués estuvo muy desacertado ayer, y la prueba es que Gracia lo sustituyó en el minuto 58. Lento en las transiciones e impreciso en los balones a balón parado, su especialidad, no fue el único que estuvo por debajo de lo exigido. Lo acompañó en la salida del campo Samu Castillejo, que también tuvo una oportunidad clara entre la del luso y el gol del Sevilla para adelantar a su equipo en el marcador, pero lanzó el balón fuera.

El Málaga no se mostró inferior al Sevilla hasta que llegó el gol de las huestes de Emery. Fue un regalo de la zaga visitante. Antunes perseguía a Deulofeu en una de las múltiples acciones del habilidoso extremo. En su ayuda acudieron los dos centrales blanquiazules, Torres y Angeleri. en lugar de uno solo. Por posición, le correspondía al argentino no dejar desguarnecido el centro de la zaga, pero fue también en auxilio del lateral portugués. Listo como el hambre, Deulofeu centró con suavidad hacia un Bacca que se vio solo en la línea frontal del área pequeña. Lo tuvo fácil el colombiano, que se limitó a empujar el balón fuera del alcance de un 'vendido' Kameni.

Erró el Málaga no solo en la jugada del 1-0, sino en la mayoría de las incursiones de Deulofeu por la banda derecha. Antunes no tenía ayuda de Samu Castillejo en esos lances del jugador catalán, cuya destreza con el balón en los pies es de sobra conocida.

El otrora firme sistema defensivo del Málaga hizo aguas también en el segundo gol local. Javi Guerra perdió el balón en la línea media, Denis Suárez se fue por velocidad de Recio y Sergi Darder e hizo la pared con Bacca, que le devolvió entre las piernas de un descolocado Angeleri. Se encontraba así el Sevilla con una victoria más fácil de lo previsto, pues el Málaga ha redondeado una gran primera vuelta y solo en un par de partidos había ofrecido la mala imagen que mostró ayer.

Se quedó sin el récord absoluto de puntos el conjunto blanquiazul, pero no hay que menospreciar el logro de haber igualado la mejor primera vuelta del equipo en toda su historia (31 puntos), en poder del Málaga de Tapia y de Pellegrini hasta, con el mérito añadido de que ambas plantillas eran superiores a la actual, sobre todo la que tuvo a sus órdenes el entrenador argentino y que llevó al equipo a la Liga de Campeones.

No debería afectarle al conjunto blanquiazul la derrota de ayer con vistas al duelo de Copa contra el Athletic. Los hombres entrenados por Gracia tienen ante sí la oportunidad de llegar lejos en el 'torneo del K. O.', en el que tiene una asignatura pendiente.