Secciones
Servicios
Destacamos
Empeoran todos los indicadores sanitarios: crece el número de malagueños que están esperando para operarse, para una primera consulta con el especialista y también el ... tiempo medio de demora, según la fotografía de la situación que acaba de hacer pública la Junta de Andalucía. Estamos acostumbrados a que quien gana el relato de lo que está ocurriendo gana la batalla, pero en sanidad esto no sirve de mucho. La media de espera para una primera consulta con un ginecólogo en el Hospital Regional es de 161 días, 177 para un traumatólogo y 163 días para un otorrino. Al paciente que esté en esa situación lo del relato le entra por un oído y le sale por el otro .
¿Cómo hemos llegado hasta aquí? Pretendiendo que donde se atiende a cuatro se atiende a ocho y que esto es infinito. Hay que añadir que durante los años de crisis la tasa de reposición de profesionales fue cero y no se sustituía a los que salían. Aunque ahora sí se hace el agujero no deja de crecer. Y es que nuestra ciudad es un 'modelo de éxito' y esto hace que cada vez tengamos más habitantes, más turistas, más residentes y un población más envejecida porque, por suerte, vivimos más.
Ninguna empresa en su sano juicio dejaría escapar a 'los mejores' después de gastar mucho dinero formándoles. El grado de Medicina es de seis cursos y tiene la segunda nota de corte más alta de acceso a la universidad (13,09 sobre 14) . Luego tienen que superar el MIR, una oposición en la que según el número que sacan pueden (o no) elegir especialidad para seguir formándose en un hospital durante al menos cinco años más. Cuando acaban, estos especialistas a los que ha costado tanto dinero y esfuerzo enseñar, tienen que buscar trabajo y muchas veces lo que les ofrecen son plazas precarias y temporales, por lo que muchos se marchan en busca de estabilidad. La Junta se queja de que no hay médicos para contratar. Se le olvida eaclarar que no los hay para las condiciones que ofrecen: encadenando contratos intermitentes de semanas y hasta de días.
El Ministerio de Sanidad también pone su granito de arena para el desastre: pretende cambiar sus condiciones laborales: que no puedan trabajar en la privada hasta cinco años después de acabar la residencia y que los jefes de servicio solo pueden ejercer en la pública. No me parece mal el objetivo, pero la forma de conseguirlo no puede ser por imposición: la exclusividad y la responsabilidad hay que pagarlas.
Y no, así no se va a arreglar.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.