Inocencia trabajó como taquígrafa en una oficina mientras su marido lo hizo en el Palacio Real de Madrid. Vivió dentro de esa fortaleza durante un tiempo hasta que se mudó a una casa justo enfrente del Palacio.Hace cuatro años, en 2014, Hacienda reclamó esa vivienda ya que la dueña del inmueble había fallecido sin herederos. Inocencia estaba en un alquiler con renta baja desde hace 80 años. Luchó por su casa y finalmente la justicia le dio la razón. Ahora, sonriente, sopla las velas en su 108 cumpleaños.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.