Detenido en Girona un yihadista que planeaba ametrallar turistas en las playas de Benidorm

El arresto de Benhachem, que se ha conocido este viernes por la tarde, ha sido posible gracias al aviso del FBI estadounidense, que fue el que avisó a las fuerzas de seguridad española de su elevado grado de radicalidad y del proselitismo que realizaba a favor del Daesh en las redes sociales, en internet y, también, en la Deep Web, la red profunda usada por criminales y delincuentes y que está fuera del alcance de la mayoría de quienes navegan online.

Precisamente, la intención del yihadista, que fue capturado dos horas antes de los ataques de Algeciras en los que otro joven marroquí asesinó al sacristán Diego Valencia, era colgar en estas redes del Estado Islámico el ametrallamiento de los bañistas tras grabar el atentado en Benidorm, una de las localidades emblemáticas para el movimiento LGTBI.

Lo cierto es que el yihadista ya había realizado prácticas de tiro. En su domicilio de la calle Montseny, en Girona, se encontró una silueta de cartón de las usadas en las galerías con siete impactos. Además, se hallaron seis vainas de dos calibres diferentes: 9 milímetros y 38 Special.

El seguimiento del FBI a los diferentes alias que usaba en la red, como 'Daniel Lofti' o 'Pipa4545', fue el que desveló sus planes de atacar en la conocida localidad turística alicantina en nombre del Daesh. La monitorización de sus conversaciones en la red y también los posteriores pinchazos telefónicos -especialmente difíciles por las extremas medidas de seguridad que adoptaba- revelaron que ya había comenzado a efectuar las gestiones con otro radical, de alias 'Karim el Maghrebi' y que probablemente se encuentre fuera de España, para adquirir fusiles AK-47, pistolas de 9 milímetros de la marca Glock y cinturones para explosivos. Las gestiones en el mercado negro, explican fuentes de la lucha antiterroristas, estaban avanzadas, aunque por el momento el yihadista no había conseguido ningún arma de fuego.

La otra gran fijación del terrorista era atentar en España contra ciudadanos marroquíes, a los que criticaba por su occidentalización, aunque no se han descubierto por ahora los planes concretos. También habló en las redes en las que se mueven los partidarios del Estado Islámico de tratar de matar algún judío residente en España o a autoridades de Marruecos en territorio nacional.

Según informó este viernes Interior, el arrestado, además, visionaba con frecuencia la ejecución de atentados yihadistas en Europa. El mismo día de su detención hizo búsquedas de cómo llevar a cabo apuñalamientos y de atentados efectuados con este tipo de armas blancas, según reveló el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska. Hasta 18 veces revisó el vídeo real de un apuñalamiento de una persona en un tren para, supuestamente, aprender la técnica. Este supuesto 'lobo solitario' también se instruía con vídeos de acuchillamientos en las cárceles norteamericanas o con atentados yihadistas por apuñalamiento en Londres o en Túnez.

El arrestado utilizaba, además, su amplio conocimiento de internet para obtener manuales con los que capacitarse por sí mismo en el uso de armas y explosivos, aunque en el registro de su domicilio el miércoles no se han hallado tampoco sustancias susceptibles de ser usadas para fabricar bombas. Sus consultas más insistentes era sobre la forma de fabricar TATP (Triperoxido de Triacetona), más conocido como la 'Madre de Satán', el explosivo que trataba de fabricar la célula de los atentados de Las Ramblas y Cambrils de agosto de 2017 y que hizo saltar por los aires la casa de Alcanar, en la que murieron dos de los terroristas. Benhachem Gharrass ya estaba tratando de comprar grandes cantidades de acetona, principal componente del TATP, a un proveedor chino.

De igual modo, había realizado búsquedas para fabricar C4, un potente explosivo plástico de uso militar, sobre cómo confeccionar coches bombas o sobre cómo preparar venenos de diverso tipo.

El Ministerio del Interior valoró este viernes el 'chivatazo' del FBI, ya que ese aviso tuvo un «rol imprescindible para la identificación y neutralización de este presunto terrorista».

Los servicios antiterrorista insistieron en que el detenido «se encontraba en un avanzado proceso de radicalización yihadista y contaba con un perfil de gran violencia y agresividad». De hecho, el propio ministerio destacó que «durante la práctica de las diferentes diligencias el detenido ha mostrado su desconfianza y repulsa altiva hacia los agentes participantes».

La Policía y la Guardia Civil se afanan ahora en reconstruir los pasos de este terrorista en España y sus posibles contactos en el país. Lo único que se conoce a ciencia cierta es que residió en los últimos años en la ciudad turca de Nigde, a 300 kilómetros de la frontera con Siria y antaño paso obligado de los 'muyahidines' que se incorporaron a las filas del ya desaparecido 'Califato'.