PP y Ciudadanos avanzan en la coalición para el País Vasco pero encallan en Galicia

La dirección nacional del PP respalda la negativa de Alberto Núñez Feijóo a ir de la mano de los liberales en los comicios autonómicos del 5 de abril. El presidente de la Xunta, que tiene mayoría absoluta y aspira a reeditarla, exige que la marca sea el PP, pero está dispuesto a integrar a dirigentes naranjas en sus listas. «En Galicia el espacio de centro derecha está cohesionado en torno a las siglas del PP, pero nos hemos comprometido a colaborar y creo que seremos capaces de encontrar la fórmula adecuada», aseguró García Egea.

El dirigente popular insistió en que hasta el 1 de marzo, fecha para presentar las listas, hay tiempo para buscar soluciones. Pero para Ciudadanos no hay más fórmula posible que la de la coalición. Los liberales vinculan cualquier acuerdo en el País Vasco con lo que ocurra «en los tres territorios», incluidos Galicia y Cataluña. «Tenemos que mantener nuestra entidad como partido», defienden fuentes de la dirección.

La formación naranja, en todo caso, no tira la toalla e insiste en que seguirá presionando «hasta el último minuto» para lograr la plaza conjunta en el feudo del PP. Y, para ello, Arrimadas se comprometió a llamar «personalmente» a Feijóo en las próximas horas para convencerle. «Ni el logro ni los nombres deben de ser un problema», remarcó la portavoz parlamentaria.

Ciudadanos apenas ha puesto condiciones al PP. Asume que Feijóo sea el candidato a la Xunta y no reclama puestos concretos en las listas. Incluso renuncia a que la coalición reciba el nombre de Mejor Unidos –su oferta inicial– y apuesta por una papeleta mixta con las siglas de PP y Ciudadanos, en ese orden. En la propuesta que el presidente de la gestora, Manuel García Bofill, envió el lunes a Génova y Feijóo, los liberales ofrecían además «una actitud de leal colaboración» en la legislatura, aunque los dos partidos conformarán grupos parlamentarios distintos.

«Esta propuesta ya supone un avance», insistió Arrimadas, que se negó a diluir las siglas de su partido en las del PP. Una condición, explicó la líder in pectore de Ciudadanos, que su partido no ha impuesto a los conservadores en Cataluña, donde el PP tiene una representación residual. «La solución –aseveró– no es que no nos presentemos sino que nos presentemos juntos». En la cúpula naranja esperan que los de Casado «superen este escollo de Galicia» porque quedad menos de 48 horas para registrar las coaliciones electorales. El viernes será el turno de Euskadi, donde el acuerdo entre ambos partidos está perfilado.

Arrimadas avanzó que a esa coalición se podrían sumar referentes de la sociedad civil y figuras de UPyD, como Maite Pagazaurtundua, europarlamentaria de Cs. Lo que no precisó la portavoz naranja es qué presencia debería tener, en su opinión, PP y Ciudadanos en la candidatura ni qué puestos deberían ocupar cada uno. «Ya habrá tiempo para ello», zanjó.